Capítulo28

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Esa mañana, Taehyung se fue antes porque le tocaba recibir a los niños. También era el día en que Yoongi hablaría con él.

Miro a Jungkook, quien bebía café sentado en la cama, mientras él se terminaba de arreglar y se desahogaba.


— Pero ¿No es mejor? Quiero decir, el niño dijo que la pasaba mal — le dijo el alfa, soplando un poco la humeante taza sin despegar los ojos de él.


Hoseok negó — No, Yoongi dijo que se esforzó en decir que no era culpa de su tío, que a veces él era el mal portado


Jungkook suspiró — Para mi es lo mismo — dio un sorbo y siguió — pero igual yo no entiendo de estas cosas, sin embargo ¿Por qué estas nervioso?


Hoseok bufó — Por qué cada vez que decimos algo sobre el comportamiento de Jimin, Taehyung lo justifica, y luego nos mira mal, no dice nada, pero no hace falta


Jungkook rio — Entonces Jimin no es el único malvado aquí, Taehyung también debería aprender a poner limites ¡Es su hijo! Yo no permitiría que alguien dañe a mi hijo, es de idiotas — gruño y suspiro —. Incluso si es mi mejor amigo, mi madre, mi pareja ¡Quién sea que sea! Eso no está bien


Hoseok le miró, sorprendido — Para no entender de estas cosas, dices cosas muy ciertas y profundas


Jungkook bufo, bebiendo y frunciendo el ceño — ¿De verdad no puedo fumar? — Hoseok le hizo un gesto — Pero el café sabe mejor con un cigarro...


— ¡Asco~!


Jungkook le miró, un poquito indignado — ¿Alguna vez lo has probado?


— No necesito hacerlo 


— Mi regla es: No puedes decir que algo es asqueroso si no lo pruebas — le dijo el alfa, rodando los ojos y dando otro trago.


Hoseok le miro con desagrado — No me obligaras a fumar...


Jungkook bufó, negando — No, por supuesto que no, si no deseas hacerlo esta bien — le dijo, quitando importancia al asunto con un gesto de su mano — pero si quieres... — Jungkook sonrió tentador, levantándose para pararse a su lado, dejando la taza en su tocador y sacando ¿ un cigarro aplastado del bolsillo de su pantalón.


Hoseok lo miro, listo para negarse, pero lo pensó. Desde joven, siempre fue el chico bueno y bien portado. Nunca había hecho nada que rompiera las reglas o se saliera de sus planes.

Fumar era parte de esas cosas...


Se levantó, mirando el pequeño objeto que Jungkook jugueteaba, suspiro y le jalo para que ambos se sentaran en su cama, nuevamente, tomó el cigarrillo, mirándolo y luego oliéndolo.


No era tan terrible y solo seria un poquito ¿cierto? Ya no era un adolescente, era un hombre adulto. Sabía que las cosas no era como en esas campañas anti drogas/cigarro/alcohol de "Prueba una vez y arruinarás tu vida por qué serás adicto por siempre"

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