Capítulo 65

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Terminó de arreglarse y salió, su novio entraba, regadera en mano y oliendo a nicotina. Le sonrió y fue a hacer el desayuno.


Comieron juntos y luego Jungkook jaló una sudadera. Taehyung y Boom ya les esperaban afuera, sonrientes.


—¡Buenos días, profesor Jung, buenos días hyung! ¿Cuánto falta para que venga también el profesor Jin y el bebé?


Hoseok rio, subiendo mientras los otros dos lo hacían —Jin en unos veinticinco días ahora, y el bebé aun le quedan unos tres meses y un par de semanas


—¡Es mucho tiempo!


Taehyung rio —Y eso que no supiste desde el principio, te parecería eterno


—¿Cuánto tiempo es, contando desde el inicio? —pregunto el niño, totalmente interesado.


—Nueve meses, pasas por invierno, primavera, llega el verano y luego el otoño y por fin hay un bebé


—¡¿Es navidad y luego casi es navidad?!


Jungkook rio y asintió —Así es, Boom, es un largo tiempo


—¿Cuándo se pone gordito el profesor Jin? La mamá de Sunji camina chistoso, y tiene una panza enorme


Jungkook rio —¿Por qué no le preguntas si te enseña su barriga?


—¡Oh! Monios, no se me había ocurrido ¡Se lo preguntaré hoy!


—Bueno, solo lo sabes hace cinco días, hay muchas cosas que aun no se te ocurren


—Si, cómo el cómo llegó ahí el bebé


Boom abrió los ojos y Taehyung gruñó, mientras Hoseok golpeaba el hombro de su risueño novio; luego de un jadeo impactado, Boom acribilló a preguntas a su padre.


Incluso cuando bajaron, el niño seguía preguntando, la directora, que iba pasando por ahí con unos papeles le escucho y sonrió pidiéndoles ir a su oficina para hablar del tema, diciendo que tenía muy buenos materiales para que los niños lo entendieran sin problemas ni sobrepasar su información.


Hoseok rio, despidiéndose de su amigo y yendo a sentarse con Jin y Yoongi —¡Buenos días!


Todos le devolvieron el saludo mientras el se acomodaba el delantal de oso y luego se sentaba, viendo con más atención a Jin —¿Qué tal? ¿Te pasa algo Jin hyung?


—Justo ahora, Jin hyung por fin se ve mejor, la directora esta tramitando un permiso, dijo que si se sentía mal fuera a casa, además dijo que arreglaría para que Jin no tuviera que recibir ni entregar a los niños hasta que volviera de su permiso


Jin suspiró, tomando algo que olía a hiervas —Nam me consiguió este té, se fue hace unos cinco minutos y la directora le prometió que le llamaría si volvía a ponerme mal, pero ya les dije que solo es por las mañanas, después me siento mejor

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