Capítulo 77

1.1K 135 37
                                    


Sonrió, viendo correr a Gabin hacia él, se agacho para poder recibirlo y lo aferro con cariño, frotando su espalda —¡Sí volviste por mí!


Jungkook suspiró, pero solo asintió —Siempre lo haré, eres nuestro bebé ahora, Hoseok sigue un poco afiebrado y por eso no vino, pero dijo que ya había sido mucho tiempo sin ti, te extraña mucho y quiere verte, yo estuve muy de acuerdo porque también me haces falta


Gabin sonrió, escondiéndose en su cuello, finalmente Yoongi terminó de bajar las escaleras, todo cargado yendo a meter las cosas al auto.


—Se porto maravillosamente, espero que quiera seguir viniendo a sus clases, Jimin dice que tiene buenos pies


Jungkook sonrió —Seguro, si él quiere vendremos —acarició la espalda del niño y le pregunto —¿Quieres seguir viniendo?


El niño asintió —Es divertido


—Bueno, entonces te traeremos ¿A qué hora y qué días?


Yoongi suspiró —Bueno, debo preguntarle bien a Jiminah, ya sabes le enseñaba en las mañanas, antes de irnos, como ahora teníamos auto llegábamos bien, pero ahora sería en las tardes, y el da clases en la academia, entonces no lo sé, quizá los sábados que su última clase es a las tres, pero deja que lo hablemos


Jungkook rio, asintiendo —Bueno, entonces luego que le preguntes nos ponemos de acuerdo y eso, ya sea aquí o en la academia esa o en casa


Yoongi asintió, sonriendo y acariciando la cabeza del niño y dándole su conejo —Si, ya lo hablaremos luego, que les vaya bien


Jungkook asintió, recibiendo las llaves del auto y despidiéndose para subir al niño en su sillita, subir él y comenzar a conducir.


—¿Quieres ir por helado? —le preguntó, intentando animar al niño.


El niño negó —Quiero a mi tío Hobi


Jungkook sonrió, asintiendo —Bueno, si quieres, te dejo y voy por tu helado, mientras tú lo cuidas un ratito ¿O quieres un poco de pastel?


El niño se relamió los labios —Helado, por favor 


Jungkook rio, asintiendo y dirigiéndose a casa.


En cuanto llegaron, el niño comenzó a manotear su cinturón, sin poder quitarlo y Jungkook se apresuró a ayudarle, viéndole correr escaleras arriba. 

Suspiró y fue tras él, la puerta estaba abierta y el niño se quitaba sus zapatos, pero comenzó a llorar al escuchar su nombre de parte de Hoseok, que llegó mientras el aun no podía quitar sus zapatos, Jungkook suspiro —Calma, cachorro, él está aquí, no se ira, déjame ayudarte —pero el niño no dejaba de llorar, y mirar a su espalda a Hoseok, que le esperaba a un par de pasos, acuclillado y acariciando su cabeza con calma.


En cuanto Jungkook le termino de sacar los zapatos el niño se lanzó al omega, restregándose en su hombro —¿Qué pasa, bebé? Aquí estoy, mi cachorrito —Jungkook suspiró, viéndole marcar al niño con su olor, intentando calmarlo —¿Vienes a dormir conmigo?

VecinosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora