-¡Papi! ¡Papi! ¡Papi!
El sueño de Hoseok se vio interrumpido gracias a que su pequeña brincaba sobre él.
-Cinco minutos más...-balbuceó el hombre.
-¡Ya levántate! –insistió la niña.
Hoseok abrió un ojo.
-¿Cómo te subiste?
-Yo la ayudé. –dijo Hyungwon sentado en la cama.
El chico tomó a Seulgi y la sentó en su regazo.
-Disculpa que te despertemos...
-¿Ya te tienes que ir? –Hoseok se sentó de golpe.
-No, no es eso. –rió. –Es que ya pasaron muchas horas y no has comido nada... ¡Auch!
Le pequeña se encontraba escalándolo como si de una torre se tratara.
-Amor, estás lastimando a Hyungwon. –ahora Hoseok tomó a la pequeña. -¿Qué hora es?
-Las ocho de la noche.
-¿¡Las ocho!? ¡Ahh! –se quejó Hoseok pues su pequeña se encontraba jugando con su cabello estirándolo un poco. -¿Qué le diste? –preguntó riendo.
Seulgi nunca había sido tan enérgica o inquieta.
-No le di nada. –contestó riendo Hyugnwon. –Cielo, ve a lavarte las manos, bajaremos en un momento.
-Nop. –siguió jugando con el cabello de su padre.
-¿De verdad? ¿Dulces, chocolates, nada? –insistió Hoseok feliz.
Para nada le molestaba ver a su hija así de animada, al contrario, era algo nuevo a lo que quería acostumbrarse.
-Ha estado así desde el viernes. –dijo Hyungwon tomando a la pequeña. -¿Verdad que si? ¿Por qué no vamos a comer y le cuentas a papá todo lo que hicimos?
-¡Sí! –se removió contenta.
-Vamos a cenar y después podrás volver a dormir ¿Te parece? –Hyungwon miró al mayor.
-Me parece buena idea. –Hoseok le sonrió.
Hyungwon bajó con la pequeña en brazos quien se la pasó haciéndole caras graciosas a su padre que gustoso le seguía el juego. Esta vez fue Hoseok quien sirvió los platos y acomodó todo en la mesa.
-El tío Min me puso un diez. –contaba orgullosa la pequeña.
-¡Wow! Amor eso es increíble.
-¡Te enseñallé mis tabajos!. –dijo queriendo bajarse de su sillita.
-Corazón, primero termina de comer. –Hyungwon la detuvo.
La chiquita bufó.
-¿Desde el viernes está así? –preguntó Hoseok divertido.
-Sí. –Hyungwon rió. -¿Es algo nuevo en ella? –preguntó curioso.
-Demasiado. Creo que eres su vitamina D. –le sonrió enternecido.
Hyungwon se ruborizó.
-Bueno... Minhyuk tuvo mucho que ver, parece un niño más.
Seulgi terminó de comer lo más rápido posible para enseñarle todos los trabajos a su padre. Hoseok quedó encantado con la energía de su niña, cuatro años le había costado verla así de animada y un día simplemente Hyungwon apareció para cambiar eso.
Si necesitaba una razón más para incluirlo en su vida ahí la tenía.
Hyungwon miraba desde la cocina como Hoseok jugaba con Seulgi a las atrapadas, ella era preciosa, él era hermoso. ¿Cómo podía alguien renunciar a aquello? No sabía con exactitud qué relación llevaba con Hoseok si es que estaban en alguna, pero aquello le encantaba y no estaba dispuesto a renunciar a eso.
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The Clan Oh-Ho ~2won/HyungWonho~
FanfictionSeúl, Corea del sur. Durante años Corea del sur de vio envuelta en luchas por el poder, lideres mafiosos queriéndose apoderar de aquellas tierras. Años y años de guerra. Hoy en día, la paz reina por las calles, pero aquella mafia nunca desapareció...