Seulgi pasó el fin de semana entero en casa de los Son, Hoseok había acudido únicamente a llevarle algunos cambios de ropa pues su pequeña le había pedido asistir el lunes al jardín con sus primos. Se le veía animada y su padre no pudo negarle tal felicidad.
Ni siquiera había recordado la pelea de sus padres, únicamente se limitó a preguntar por su papi Hyungwon, a lo que Hoseok le respondió que se encontraba muy bien y que pronto podrían estar juntos de nuevo, como la familia que eran.
En la casa de los Lee, la tensión era menor. Con la descion de Hoseok los problemas desaparecieron por completo, Hyungwon tenía mas tiempo para su familia, para estar en casa, para sí mismo, había estado tan metido en el asunto de Iksoo que ni siquiera se había percatado de lo mucho que le hacía falta a Hoseok y viceversa.
Lo supo hasta ese día, en el que Hoseok le hizo el amor como nunca.
Sin nadie en casa no había quien los detuviera o por qué guardar silencio, se gritaron todo ese amor que se venían guardando y una vez mas confirmaron que estaban hechos uno para el otro.
Hyungwon tenía a Hoseok sobre su pecho, habían recuperado ya la respiración hacía unos minutos. El pelinegro acarició la argolla en el dedo anular del castaño, aquella que solo era un símbolo de lo que se convertirían mas adelante.
-Amor...-susurró.
-¿Sí?
-¿Aún quieres casarte...? –preguntó Hoseok con un hilo de voz.
-¿Por qué no querría hacerlo? –respondió Hyungwon confundido.
-Bueno, pues...por lo sucedido estos últimos días...
Hyungwon tomó la barbilla del mayor y lo hizo mirarlo a los ojos.
-Lo único en lo que pensaba todo este tiempo era en ustedes, en su seguridad... Aunque no pareciera, todo el tiempo estaban en mi cabeza. La idea de que les hiciera algo...
-Shh...-interrumpió Hoseok. –Jamás permitiría que alguien los tocara, sucedió una vez, no pasará dos veces.
-Lo mismo quisiera decir yo. –suspiró pesadamente. –Quisiera ponerlos, a ti y a Seulgi, dentro de una bola de cristal para que no les pase nada.
Hoseok sonrió con ternura y besó la mano del contrario.
-Con el amor que nos brindas es suficiente. –susurró manteniendo su sonrisa.
Hyungwon sonrió apenas.
-Quisiera arreglar las cosas con Seulgi cuanto antes. –admitió.
-Mañana tendré la junta con los chicos, tal vez puedas ir por ella al jardín y pasar un tiempo juntos, solo ustedes dos. –propuso el mayor.
-Eso me encantaría. –aceptó con una sonrisa.
-Bien. –besó sus labios.
El tío Nunu fue el encargado de llevar a los tres chiquillos al jardín para despues dirigirse a la oficina, donde ya todos lo esperaban.
-Bien, ya que estamos todos podemos comenzar. –anunció I.M. al verlo llegar.
Wonho asintió.
Se sentía mal por Hyungwon, no pasaba por alto todo lo que se esforzó por querer encajar en el Clan, al llegar al edificio se dirigió a la oficina de H.one, el trabajo de investigación que había realizado era simplemente increíble, toda esa dedicación y aferracion, logró dar con Iksoo casi sin ayuda, un elemento muy valioso para el equipo.
Pero también sabía como acabaría aquello si no se manejaba con cuidado. Perder la cabeza era algo muy común en las personas que trabajan para él, toda esa presión y carga sobre sus hombros no era fácil de llevar. Se debía trabajar siempre con la cabeza fría y recordando el objetivo del Clan: Solo justicia, nunca venganza.
ESTÁS LEYENDO
The Clan Oh-Ho ~2won/HyungWonho~
FanficSeúl, Corea del sur. Durante años Corea del sur de vio envuelta en luchas por el poder, lideres mafiosos queriéndose apoderar de aquellas tierras. Años y años de guerra. Hoy en día, la paz reina por las calles, pero aquella mafia nunca desapareció...