" La Pequeña Cowell" - Liam Payne y Tú.

Capítulo 36.

Capítulo 36.

Narra Ross.

Desde que __, corrió para abrazar a Riker me sentía terriblemente mal, los celos comenzaron a dominarme y poco a poco crecieron al ver como __ miraba lo terriblemente seguido y casualmente él estaba más serio que nada. Cuando terminamos de cenar nos sentamos un rato en la sala y __ se empezó a tornar más sería hasta que de la nada simplemente se paró de su lugar.

__: ¿Me disculpan por favor? Tengo que salir.-dijo con un hilo de voz y salió prácticamente corriendo de la casa.

Todos nos quedamos atónitos y empezaron a intercambiar miradas y después tenía seis miradas posadas en mí, sabía lo que querían decir, de hecho era algo que iba a hacer es solo que yo también me sorprendí por la reacción de __.

Ross: Iré a ver qué es lo que tiene.-avise restándoles importancia para salir por la misma puerta por la que salió __ hace unos minutos.

El jardín estaba oscuro así que no podía ver mucho por lo cual me tropecé con algo que esta tirado en el suelo, cuando me gire para verlos me di cuenta de que eran los tacones de __, ¡Mierda! Ella solo se los quita cuando quiere correr los tome como pude y comencé a buscarla por todo el jardín hasta que la vi abrazada de Riker, *Tranquilo Ross, apuesto a que no es lo que estás pensando* me regaño mi subconsciente, trate de hacerle caso y decidí acércame para ver lo que estaba pasando, pero me tensé más cuando logre ver que se separaron para que __ pudiera acariciarle la mejilla a Riker con su pulgar y que después mi hermano repitiera la acción, estaba más que molesto ¡Como demonios pudieron hacerme eso! Él es mi hermano, solté los estúpidos tacones y me quede inmóvil hasta que no aguante más las ganas corrí a separarlos bruscamente para después llevarme a __ del brazo al otro lado del jardín.

Narra __:

Riker se dio cuenta que estaba llorando y se separó de mí para mirarme a los ojos, los cuales ya estaban hinchados y  cubiertos de rímel.

Riker: ¿Qué tienes? También puedes confiar en mí.-me pregunto un poco más tranquilo.

__: Nada, es solo que, me dio nostalgia ahí adentro… ver la familia unida y contenta… es solo eso me dio nostalgia pero no importa, tú luces mal desde hace tiempo, no quieres comentar nada.-le conteste restándole importancia, no estaba muy segura de hablar ese tema con él, a penas lo conozco, además ni siquiera Ross sabe lo de mi papá.

Riker: La verdad… lo mismo, es solo que verte a ti y a Ross, me recuerdan a cuando me enamoré de una chica mayor que yo, solo que no eran solo dos años si no seis, así que ella no quiso ser nada más por la diferencia de edades.-se sinceró conmigo como si nos conociéramos desde hace ya mucho tiempo.

__: Lo siento mucho.- y dicho esto lo abrace otra vez, pero ahora escondiendo mi rostro en su pecho, lo hice sin pensarlo porque eso era lo que necesitaba… un abrazo.

Me separe de el al darme cuenta que seguía llorando para poder limpiarle una lágrima que corría por su mejilla con mi pulgar y el repitió mi acción, por lo cual reí un poco.

__: No debiste de haber hecho eso, ahora tendrás rímel en tu dedo.-le dije divertida, él me iba a contestar pero de repente sentí que alguien jaló de mi brazo con fuerza obligándome a parar, era ¿Ross? Me llevo de la fuerza hasta el otro lado del jardín donde había un poco más de luz.

__: ¿Ross? Ross, suéltame por favor me estas lastimando.-le dije mientras caminábamos un poco preocupada, jamás se había portado así conmigo.

Ross: No creo que más de lo que tú a mí.-me contesto furioso.

__: ¿De qué estás hablando?-le pregunte antes de comenzar a llorar, me dolía de verdad que me tratará así, cuando él lo noto paro en seco y disminuyo la tensión de su mano así que aproveche para soltarme bruscamente de él para verlo a los ojos, cuando lo hice su rostro cambió drásticamente, ya no estaba enojado, ahora parecía más bien preocupado.