Michelle Rojas
Flashback
- Hazlo Michelle – susurré y sentí la mano de mi mejor amigo –
- Tú puedes mi vida – volteé a verlo y suspiré –
- Acabo de dejar a Hera y ahora vengo a acabar 15 años junto a ella ¿Crees qué es sencillo? – susurré en un hilo de voz y me abrazó –
- Nunca es fácil, pero tú – se alejó y agarró mis mejillas para verlo – eres muy valiente ¿Lo recuerdas? – preguntó y me reí –
- Ya vengo – dije y le di un beso en la mejilla – Fernando – abrí la puerta y me bajé pero me apoyé de la ventanilla – si no salgo, vete ¿si? – frunció el ceño y suspiró –
- Déjala Michelle, ella no va a cambiar, mereces ser feliz – dijo y asentí –Respiré profundo y saqué la llave de la cartera, miré la casa donde he vivido durante 15 años, se me arrugó el corazón ¿Lo harás en serio Michelle?. Caminé hasta la entrada y abrí la puerta lentamente, las luces están encendidas así que supongo que Alondra esta acá.
- Alondra – grité al entrar a la sala principal –
- Hasta que la señora llega – dice bajando las escaleras y ruedo los ojos –
- Hola – saludo dejando la cartera en el sofá y Alondra se acerca a mí –
- Hola – saluda triste y se me hizo un nudo en la garganta –
- ¿Podemos hablar? – pregunto seria y ella asintió –Alondra y yo nos sentamos frente a frente en el sofá, nos mirábamos y recordé desde que la conocí hasta la actualidad y era hora, sentí la yema de sus dedos en mi rostro, mientras lo delineaba y cerré los ojos lentamente, suspiré pesadamente.
- Michelle perdóname por ser tan imbécil, yo sé que no he sido la mejor esposa desde hace años, pero este fin de semana sin ti he podido pensar bien las cosas – la miraba atentamente, no sé si escucharla sea lo mejor, pero es justo – y entraré en un tratamiento para dejar el alcohol – suspiró y bajó el rostro – es hora de hacer realidad muchas cosas que tanto temía, pero quiero que seas feliz mi vida – alzó la mirada y mi corazón latía rápidamente –
- ¿Qué quieres decir? – pregunté temblando –
- Que quiero hacerte feliz Michelle – agarró mis mejillas y me dio un casto beso – hablé con una colega y a partir de mañana vamos a la clínica para comenzar el tratamiento de fertilización – me quedé boquiabierta –
- ¿Ha… Hablas en serio? – pregunté titubeante –
- Claro mi amor, hablo en serio, bueno si todavía quieres ¿aceptas? – preguntó sonriendo y chillé feliz –
- Sí, si quiero, obvio que quiero – grité emocionada y la abracé fuerte – júrame que cumplirás todo lo que estas diciendo Alondra Maurin Ashton – la apunté con el dedo y ella alzó ambas manos prometiendo que sí –Le di un suave beso y sonreí en medio de el, por fin seria feliz, mi sueño se haría realidad, Alondra enredó sus brazos en mis caderas y yo me subí a ahorcajada en ella mientras enredaba mis brazos en su cuello.
- Te amo Michelle – susurró en mi cuello –
- Te amo – abrí los ojos y me quedé viendo a la nada – Alondra – susurré y me detuve – pero estoy cansada – dije y Alondra estaba agitada mirándome confundida –
- Entiendo – respiró profundo y nos levantamos del sofá – gracias por volver, a partir de ahora todo irá mejor – dijo y me dio un casto beso para ir hasta la cocina – ¿Quieres comer? – preguntó y negué –
- Ya vengo – dije y salí de casa –Vi a Fernando apoyado del coche y al verme sin maletas negó lentamente, me volvió a ver y sin decir nada solamente me dio un abrazo fuerte, un beso en la frente y se subió en el coche para ir a entregárselo a Regina, suspiré al verlo irse y me sentí muy mal, pero es una decisión tomada, quiero una familia y ahora no voy a desaprovecharlo, sonreí al recordar que tendré un bebé y entré a casa, me despedí de Alondra y subí a mi habitación, me quité todo y fui hasta el baño para echarme una ducha.
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INSTINTOS
RomantizmMichelle Rojas, una vida tranquila, directora de Arcadia School, su sonrisa calma hasta la peor de las guerras y su voz hasta el peor de los demonios, es una mujer con muchos secretos y frustraciones, a pesar de ello, sonríe y sigue adelante, su sue...