|Rechazame| Christopher Vélez

Capítulo 58

- Estoy segura de que tarde o temprano te darás cuenta de la realidad - Aseguró Romina.
- Y si eso pasara, no serías tú a quien yo voy a buscar, por favor vete ya, no regreses Romina, no te merezco -.

Yo solo me limitaba a mirar la escena, Christopher le estaba dando una opción muy simple, irse y buscar a alguien que pueda amarla.

- ¿En verdad estás dispuesto a perderme y a tu familia por esta niña? -.

Puse los ojos en blanco escuchando su pregunta.

- Romina, entre tú y yo no hay nada, la relación que tengas con mi familia no me interesa, así como a ti no te interesa mi relación con ___, date el valor que mereces y deja de buscarme, deja de intrigar para buscar problemas entre mi novia y yo, no te amo y no podré hacerlo nunca, mi vida ya no te incumbe, de la mejor manera te pido que nos dejes tranquilos -.

Christopher estaba siendo tan razonable con Romina, le estaba dejando el camino libre y parecía que ella no podía entender que ya no queríamos verla, en especial Christopher.

- No puedo creer lo que estás diciendo, es tan poco razonable de tu parte - Insistía con lo mismo.
- ¿Necesitas que te escolten a la salida? - Preguntó Chris ya cansado.
- Christopher no me puedes hacer ésto -.
- Si me disculpas, tenemos cosas que hacer - Dijo con la intención de cerrar la puerta, y es que era cierto, teníamos cosas que hacer.
- Christopher - Le grito.
- Hasta luego Romina -.

No tuvimos más alternativa que cerrar la puerta, Romina ya había dicho todo lo que tenía que decir y Christopher también, y a pesar de que me molestaron mucho los comentarios de esa mujer, al final no quería generar más problemas y razones para tener que volver a verla.

- ¿Ya estás lista mi amor? - Preguntó en cuanto llegamos al living del departamento.
- Por supuesto, solo tomo mi bolso y podemos irnos, ¿Tú terminaste? - Cuestione.

Romina había llegado a interrumpir.

- Sí amor, descuida, vámonos -.

(...)

Chris y yo estábamos en el centro comercial buscando algún regalo para el hijo de uno de sus amigos, nos habían invitado a su bautizo.
Sin embargo, el sonido de mi celular me hizo atender a la llamada que estaba entrando, era Zabdiel, Christopher me miró unos segundos pero continuó viendo las cosas.

- Hola Zab - Dije feliz.
- ¿Christopher es tu novio y el hombre con el que vives? - Preguntó de repente.
- ¿Qué? -.

Zabdiel sabía absolutamente todo lo que había pasado cuando Christopher y yo nos volvimos novios, solo que seguía sin saber quién era esa persona, había salido de viaje y no creí necesario decirle.

- Estoy dos tiendas atrás de ustedes, van tomados de la mano, ¿Por qué no me dijiste que era Christopher? - Cuestionó.

Oh no.

- Zab, es demasiado complicado, juro que iba a decírtelo cuando volvieras - Aseguré.
- Se suponía que había confianza entre nosotros, y no hablo solo de ahora, sino desde que nos conocimos, ¿Por qué ocultarlo? -.
- Porque sabes lo difícil que fue todo, ni siquiera yo estaba segura de las cosas, y podremos hablar cuando tú quieras, te prometo que no habrá más secretos, pero no me digas que tú también vas a alejarte, por favor Zab - Dije con pesar.

Para este momento Christopher ya me miraba confundido, claro que estaba escuchando todo lo que salía de mi boca.
Zabdiel tardó unos segundos en responder.

- No más secretos, sabes que te quiero y que me preocupas, jamás podría darte la espalda - Dijo.
- Eres increíble Zab, en serio -.
- Dile a tu hombre que todo está bien y que quite esa cara de confusión, hablamos más tarde para poder vernos, ¿Te parece bien? -.
- De acuerdo Zab, te quiero, cuídate -.

Con una sonrisa finalicé la llamada, sabía que Zabdiel no me juzgaría como todos.

- ¿Zabdiel? - Preguntó con una ceja arqueada.
- Somos amigos y eso jamás va a cambiar, ya volvió de su viaje y nos veremos porque tenemos mucho de que hablar - Dije.
- ¿A qué te referías con no más secretos? -.
- Zabdiel en serio me ha apoyado muchísimo, y no quiero seguir ocultándole que tú eres el hombre del que estoy perdidamente enamorada y por quién justo ahora, llevo la vida más feliz del mundo entero - Expliqué.

Christopher dejó salir una sonrisa y me tomó por la cintura.

- Te amo ¿Entiendes? Eres por quién todas las mañanas abro los ojos y las ganas de vivir me brotan por los poros, no quiero que eso cambie o que tú dejes de amarme -.
- ¿En serio crees qué podrás librarte tan fácil de mí? - Pregunté irónica - Amor, eres lo más bonito en mi vida y no hay nada más que yo desee que estar contigo por siempre, mi amor por ti jamás se acabará, estás marcando mi vida como no imaginas, no eres una etapa Chris, no eres un momento o un simple experimento, eres el hombre del que me enamore y con el que estoy segura de estar toda la vida -.

No esperé ni un minuto más cuando uni sus labios con los míos.

- Te amo mi bonita -.

(...)

Para ser honesta la estaba pasando muy bien en el ambiente social de Chris, sus amigos no eran aburridos ni hacían cosas de señores como todos piensan, al contrario, se dejaban llevar por el momento aunque con cierta madurez.
Me sentía orgullosa porque oficialmente era yo, ___ Tirbell, quienes las personas ven como su novia, como la mujer que lo hace feliz, porque ya no teníamos que escondernos ni fingir que nada pasa entre nosotros cuando la realidad es que me encantaba que el amor saliera a relucir, no tenía miedo de amarlo y Chris me había demostrado que él tampoco de amarme, y a pesar de que me gustaría que nuestra familia fuera parte de nuestra felicidad, me bastaba con saber que no había nada en este mundo que pudiera separarnos, porque al menos yo lucharía de por vida, con tal de no tener que volver a reprimir mi amor por él... ¿Rechazame? Definitivamente jamás lo volvería a hacer.