Capítulo 35

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*___, tenemos que hablar.

¿Hablar? Ahora solo quería golpear su bonita cara por el horrible momento que me hizo pasar con su novia en la mesa, teniendo que presenciar como tomaba su mano, lo besaba, estaba de encimosa con él, Christopher en serio me había hecho enojar demasiado.

*¿Y de qué quieres hablar? La verdad no tengo mucho tiempo así que sé rápido.

Ya estaba recostada en mi cama con la intención de dormir, había sido un día pesado para mí.

*No quería que pasaras por eso con Romina, lo siento.
*Ay claro, no querías pero no pudiste decirme que hoy la llevarías a cenar con tus padres, pude haberle dicho a Lía que no podía ir con ella, ¿Tantas ganas de tenernos en el mismo lugar tenías? ¿Qué querías comprobar?
*No quería comprobar nada, creí que ibas a enojarte si te decía que saldría con Romina.
*¿Enojarme? Créeme cuando te digo que sé claramente quien es tu novia y grandezas de que se da, es obvio que tienes que salir con ella, lo que en serio me molestó fue que permitieras otro enfrentamiento entre ella y yo.
*Lo lamento de verdad, no quiero que te enojes conmigo, por favor, mañana podemos pasar todo el día juntos si tú quieres.

Oh no, si él podía jugar yo también lo haría.

*No puedo, tengo clases y después una cita con Mario, puedes llevar a tu novia a una cena más grata con tu familia, hasta mañana Christopher.

Puse el celular en silencio y lo apagué para después dejarlo en mi mesita de noche ignorando los mensajes y llamadas que comenzaron a entrarme, estaba tan cansada que al final me quedé profundamente dormida.

|Al día siguiente|

Cuando subí a la camioneta para irme a la escuela fue que decidí mirar mi celular por primera vez en el día.
30 llamadas perdidas de Christopher, 30 mensajes suyos.

*¿Una cita con Mario?😠
*Más te vale que sea una jodida broma ___.
*Ya te dije que lo que pasó con Romina no fue intencional, no quería hacerte pasar por eso.
*Deja de ignorarme y ve mis mensajes.
*Atiende ___, me estoy enfadando.
*Contesta las llamadas y evita que vaya a tu casa ahora mismo.
*___, deja de hacer ésto porque de verdad estoy molesto.
*Ya responde por favor.
*Estoy harto, iré a tu casa si sigues ignorandome y te juro que no te va a gustar.
*Responde ___, ya.

Dejé de ver los mensajes cuando noté que ya estaba en línea, salí rápidamente de su chat y apagué el celular.
¿Iba a ser capaz de ir a mi casa? Él sí que estaba loco.
Como lo supuse nuevamente mi celular comenzó a sonar, era Christopher con otro mensaje.

*Estuve hablando solo toda la noche, ¿Ya estás más tranquila?
*Estabas en línea y me dejaste en visto, al menos merezco que me respondas si estás bien.

Mierda, pues no me quedaba de otra mas que responder.

*Cuando una persona no te responde por más que insistes quiere decir que no desea hablar contigo, entonces sí Christopher, estoy bien, ¿Es lo que querías saber? Ya lo sabes, ahora déjame en paz.

Tenía que conformarse con eso, ya había atendido sus mensajes y no podía quejarse, no como lo hizo durante la noche.

*Tenemos que vernos, por favor, no podemos estar así.
*Yo no quiero verte, ya te ví ayer y créeme que eso me bastó.
*___ no me refiero a eso, ya me quedó claro que lo que hice estuvo mal, debí evitar esa situación a toda costa, deja de estar molesta conmigo ya por favor y acepta que hablemos.
*Ya te dije que tengo una cita con Mario, así que no puedo verte.

Claro que esa cita ni siquiera existía, pero podría hacer que exista solo para molestar a Christopher.

*Tú sales con ese estúpido niño y te juro que vamos a tener problemas, problemas muy graves.
*¿Ahora estás celoso? Vamos Christopher, yo tuve que ver como Romina tomaba tu mano, como te besó las veces que le dió la gana frente a mí, solo faltaba que me dijera cuántas veces al día tienen sexo cuando no estás conmigo.

Ni siquiera sabía si eran celos u otra cosa, pero no me había gustado.

*¿Estás celosa?
*No Christopher, no estoy celosa, solo necesito defenderme con algo.

No podía darle la satisfacción de verme celosa por su estúpida novia.

*Bueno yo sí estoy celoso y mucho, así que no vas a ver a Mario y cancela esa ridícula cita que estoy seguro, no quieres tener.
*De lo contrario voy a llegar a tu escuela, justo a la entrada para que todos me vean, y de ser necesario, yo mismo bajo por ti.

Ay no, ¿Qué?

*Ay por favor, no serías capaz.
*¿Ah no? ¿Quieres probarme? Hazlo entonces, nos vemos más tarde.

¿Él en serio sería capaz de hacer algo como eso? Como sea no quería saberlo, estoy segura de que me desmayaría si alguien se entera.

*Maldita sea Christopher, nos vemos donde siempre, no vayas a hacer una tontería.
*Bien pensado nena, te veo donde siempre, y te juro que si no llegas van a pasar cosas que tú no quieres.
*Está bien, está bien, ya déjame en paz.
*Tranquila muñeca, cuídate y come por favor.

Cuídate y come por favor, cuantas ganas de mandarlo al diablo tenía.

(...)

- Princesa, ¿Te gustaría salir conmigo hoy por la tarde? - Preguntó Mario.

Siempre que trataba de hablar con Mario sobre lo que sentía él no me dejaba, o alguien nos interrumpía o él tenía algo lindo que decir o hacer por mí, le bastaba con que siguieramos juntos aunque no como novios y eso me estresaba cada vez más, ya no sabía cómo decirle que no quería salir con él o que no podía porque mis tardes estaban dedicadas al patinaje y al jodido de Christopher.

- Mm, me gustaría mucho pero no puedo - Dije.
- ¿Qué? ¿Es en serio? ¿Y ahora por qué? -.

Claro que entendía que estaba cansado de que le dijera una y mil veces no puedo, los pretextos se estaban terminando para mí.

|Rechazame| Christopher VélezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora