Capítulo 28

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Christopher's POV.
No eran celos, yo estaba más que seguro de eso, pero el cuerpo, los besos de ___ después de tenerlos para mí, me habían dejado saber que no estaba dispuesto a compartirlos, jamás fui un hombre infiel hasta que ___ apareció en mi vida y Romina quedó en segundo plano, por lo tanto jamás me atreví a estar con una mujer que tuviera a alguien más, y con ___ no sería la excepción, quizá era muy egoísta pero no podía evitarlo, no era su dueño, lo sabía bien, pero tampoco podía quedarme cruzado de brazos.

- ___, lo que hacemos es algo que nos hace sentir bien a los dos, comprendo que de por medio está Romina pero sé perfectamente que no es obstáculo para ti - Dije.
- ¿Cómo estás tan seguro? - Preguntó mientras elevaba un ceja.
- Porque si lo fuera tú no estarías aquí - Afirmé.

Ella pareció aceptar lo que con justa razón dije.

- Ya me dijiste que no te gusta ese chico, ¿Entonces podrá seguir tocandote mientras yo veo? - Cuestione.
- Pues no debiste ver nada si no estuvieras aquí - Dijo mientras ponía los ojos en blanco.
- ¿Entonces así es como quieres llevar ésto? Saliendo con dos -.

Ella se quedó callada unos minutos con la mirada al frente.

- No es que quiera salir con dos, pero no soy de tu propiedad y tampoco me gusta que me prohíban cosas, lo nuestro no nos va a llevar a nada y al final seguramente voy a terminar sola por alejar a las personas -.

No quería parecer un manipulador pero tenía que saber cómo hablarle para que se diera cuenta de que no necesitaba mas que estar conmigo.

- Lamento si insinúe cosas que no, claro que no puedo prohibirte ni obligarte a nada, pero si no quieres nada con esos niños de tu edad, ¿Por qué necesitas seguir ahí? ¿Es necesario en serio? - Pregunté más tranquilo.

No me estaba haciendo la víctima pero al menos así tal vez podría lograr algo.

- Bien, pero dame tiempo ¿Sí? Necesito hablar con Mario y aclarar mi cabeza y sentimientos - Aceptó finalmente.
- Tomate tu tiempo, solo que no te toque - Pedí.

Ella asintió levemente, entonces yo la tomé por el mentón y uní sus labios con los míos en un beso.

- ¿Quieres qué vayamos a comer a algún lugar o en mi departamento? - Pregunté.

Claro que sabía la respuesta, solo quería confirmarla.

- En tu departamento - Respondió de inmediato.

Reí ligeramente y asentí para poner el auto en marcha.

- No vuelvas a venir a la escuela, al menos no por mí, y tampoco me llames ¿Puedes? Por favor, si alguien nos ve juntos o Lía, ésto será un caos total -.
- Nadie nos vió ahorita, ya te dije que dejes de preocuparte, solo déjate llevar -.
- Lo hago Christopher, pero en serio no se me ocurre nada para justificarnos si alguien te llega a ver conmigo, ¿Tú qué le dirías a Lía? - Preguntó.
- Que tal vez necesitabas preguntarme algo relacionado a mi empresa, a mis viajes, aclarar dudas que pueden servirte más adelante, yo que sé - Dije simple.
- Claro, para ti es fácil porque Lía jamás se atrevería a pedirte explicaciones, en cambio a mí me bombardea con preguntas, y no quiero que piense que ya no confío en ella - Dijo con cierto pesar en su voz.
- Voy a ayudarte a cambiar esa inquietud que tienes, ¿Sí? Nadie se va a enterar de absolutamente nada porque vamos a actuar como hasta hace unos días lo hacíamos, como dos completos conocidos que solo conviven por la amistad de nuestras familias, ___, no quiero que cuando estés conmigo sientas miedo o preocupación por el que dirán -.

Ella no me decía nada, sencillamente mantenía su mirada fija en sus piernas, yo podía verla de reojo.
Estiré mi mano derecha y tomé la suya para después depositar besos en el dorso de ésta.

- Te entiendo ¿Sí? No te sientas presionada por mí ni por nadie, ya te dije que yo te ayudaré con todo, ya me demostraste que eres muy segura de ti misma y que consigues lo que quieres porque de verdad eres distinta, me gusta eso ___, me gusta verte tan atrevida y vivaz, así tal cual eres, no cambies eso ¿Quieres? - Me sincere.

Ella dejó salir una leve risita y me miró mientras yo seguía viendo al frente.

- Está bien, solo porque a ti te gusta - Dijo con un tono divertido.
- Cuando lleguemos a mi departamento te voy a enseñar que más me gusta - Aseguré.
- Oh vaya, por supuesto que quiero ver eso - Me dijo coqueta - Oye, pero antes de cualquier cosa, ¿Sabes algo acerca de una fiesta el sábado? -.

Ese coqueteo había quedado olvidado por un momento dada la inquietud de su pregunta.

- ¿Aún no te han dicho nada tus padres? - Inquirí.
- Pues no, cuando dijiste que estabas aquí Mario me dijo que quería salir conmigo, mentí diciendo que tenía que recoger unas cosas con mis padres y Lía me dijo que si estaba relacionado con la fiesta del sábado así que se me ocurrió decir que sí, solamente que no entiendo de que fiesta me habló -.
- Bueno, nuestros padres acaban de hacerse socios, el sábado celebrarán dando una gran fiesta en compañía de otros empresarios, familias importantes y reconocidas como las nuestras estarán presentes - Expliqué.
- Vaya, ¿En serio? -.

Ella parecía sorprendida de verdad, ¿Cuándo pensaban decirle sus padres?

- Espero que mis padres me den la noticia pronto, supongo que debemos buscar un outfit adecuado, ¿Llevarás a Romina? - Preguntó interesada.
- No creo que llevarla me permita estar contigo -.
- Pero no estaremos juntos, habrá demasiado gente seguramente -.
- Juntos como dos personas que se ven a escondidas no, pero no creo que tus padres, los míos, o la sociedad entera, vea como un mal acto bailar contigo, hablar contigo y poder pasar un poco de tiempo de calidad frente a gente que seguro estará metida en sus asuntos - Mencioné.

___ suspiro y asintió.

- Creo que tienes razón, en una fiesta puedes estar con quién se te de la gana, iremos en son de amistad -.

|Rechazame| Christopher VélezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora