Vmin - Magnetismo

CAPÍTULO 47 - ABORDAR

Con la misma facilidad de siempre, el rubio levantó la última silla para colocarla sobre la mesa, dándole el paso al trapeador que utilizaba Jimin, quien se hallaba limpiando el piso del restaurante.

- ¿Y bien? - preguntó Lucas mientras se hacía a un lado.

- No lo sé...

- ¡Mañana es viernes Jim!

- Si, y también tenemos que trabajar.

- Será después de que terminemos.

- ¿No crees que es tarde? - comentó Jimin al mismo tiempo que dejaba de trapear para mirarlo - Además siempre acabamos cansados y...

- Oh no, no comiences con excusas. - pidió Lucas cruzando sus brazos - Si no quieres salir, lo entenderé.

- No es eso.

- ¿Entonces qué?

- Lucas, en verdad me encantaría aceptar tu invitación pero no puedo.

- Tienes planes, ¿no es así? De lo contrario no creo que estarías rechazando mi propuesta.

- Ya te dije, estoy preparando un final que debo presentar la próxima semana. Mi mente está en eso ahora.

- Ok. Simplemente intentaba planear algo para que te relajaras y pasáramos tiempo juntos. Últimamente solo te puedo ver cuando tenemos que trabajar y eso no está bien, no para mí.

- Lo entiendo y de verdad te lo agradezco Lucas. Prometo que cuando esto termine, seré yo quien te invite a salir.

- Tomaré tu palabra a medias.

- ¡Cumpliré! - dijo dándole un leve golpe de puño en uno de sus hombros.

- Si tu lo dices...

- ¿Ahora no quieres creerme? - preguntó dejando a un lado el trapeador junto al balde de agua, para luego acercarse al rubio.

- No es que no quiera pero... - Se detuvo viendo a Jimin remangar las mangas cortas de su camiseta para descubrir sus hombros - ¿Qué haces?

- Te daré algunas lecciones para que no dudes de mi palabra. - respondió elevando ambos puños mientras comenzaba a rodear a Lucas.

- ¿Ah sí? ¿Tú a mi? - dijo el rubio riendo.

- Si, digamos que alguien me enseñó cómo hacerlo - recordó Jimin, haciendo algunos movimientos para estirar su cuello mientras Lucas empezaba a tomar posición también.

- Ok, solo espero que esa persona haya sido alguien tan bueno como yo.

- Puede ser, aunque la verdad es que yo le tuve que enseñar el resto.

- ¡Ja! No te pases de listo.

- No puedo evitarlo. - sonrió Jimin, lanzando el primer golpe con la palma abierta, el cual Lucas esquivó rápidamente.

- Nada mal Jim... - comentó el rubio, devolviendo el movimiento y rozando su palma sobre la mejilla izquierda del castaño. - Pero, aún eres algo lento.

- Solo te estoy dando algo de ventaja.

- ¿Ah sí? ¿Y qué me dices de esto? - volvió a rozar su palma sobre la mejilla contraria esta vez, tomando por sorpresa a Jimin.

- ¡Ya lo sabía!

- Seguro - dijo riendo Lucas.

- ¡Ahora verás! - avisó Jimin antes de abalanzarse hacia el rubio y estamparlo contra la pared.

- ¡Ouch! ¡Eso me dolió Jim!

Y sin más, ambos comenzaron a jugar como tiempo atrás lo hacían, como dos niños que pretendían pelear sin lastimarse. Lucas sujetando del cuello a Jimin y éste tratando de liberarse, dando leves golpes sobre su abdomen, sin poder derribarlo.