Mientras varios estudiantes deanbulaban para encontrar un lugar vacío en alguna mesa, Jimin estaba sentado y se había colocado sus audífonos para cesar el parloteo de aquella voz que comenzaba a molestarlo.
Una vez más, dió vuelta a la siguiente hoja del libro que leía, mientras bebía el resto de la malteada de frutilla que le quedaba.
En un descuido, el de cabello negro aprovechó la oportunidad para estirar su brazo y arrebatarle el libro, sin darle tiempo de reaccionar.— ¡Jungkook! — se quitó los audífonos y extendió su mano con la palma hacia arriba — ¡Dame eso!
— No, hasta que me escuches. — respondió, escondiendo el libro detrás de su espalda.
— Jungkook... — advirtió nuevamente Jimin, inflando su pecho mientras los orificios de su pequeña nariz se agrandaban.
— Jimin-ssi...— insistió mientras levantaba sus cejas, mirando detenidamente al castaño.
— ¡De acuerdo! — dijo el castaño suspirando mientras se cruzaba de brazos. — ¿Qué quieres ahora?
— Quiero saber qué es lo que te sucede. Últimamente has estado actuando extraño.
— Te he dicho que no es nada.
— ¿Nada? Estoy seguro que hay algo que estás escondiendo. Vamos, sueltalo.
— ¡Que no! — Extendió nuevamente su mano hacia Jungkook. — Ahora dame el libro.
— Ok. Pensé que confiabas un poco en mí, Jimin-ssi — Le devolvió el libro.
— Lo hago, solo que no tolero cuando preguntas más de lo necesario. — dijo al sujetar el libro en sus manos.
— ¡Kook! — se escuchó la voz de un chico alto, de tez blanca y cabello negro.
— Hola Yugyeom — observó al alto sentarse a su lado.
— ¿Interrumpo? — preguntó Yugyeom.
— No. Es más, agradecería que entretengas un poco a Jungkook, no para de hablar. — dijo Jimin retomando su lectura.
— Como digas. — sonrió y miró a Jungkook — ¿Qué has hecho ahora?
— ¡Nada! pero hay otras personas que sí hacen y además lo ocultan.
— Ok...si están así las cosas, mejor vuelvo luego. — Yugyeom intentó levantarse pero el brazo de Jungkook se lo impidió.
— No, ahora te quedas.
Mientras Yugyeom platicaba con Jungkook, el castaño prefirió continuar sumergido en las páginas de su libro, pero al sentir nuevamente las voces de sus acompañantes que comenzaba a molestarle, Jimin se dispuso a volver a colocarse los audífonos. Pero luego de hacerlo, esta vez se vió distraído por la persona que caminó por al lado suyo hasta llegar a una mesa vacía y no muy lejana a él.
Taehyung se quitó el bolso marrón, que traía sobre su hombro, para dejarlo sobre la mesa junto a la lata de Coca-Cola que traía en una de sus manos mientras se sentaba.
— H-Hola Hyung...— dijo de pronto el joven delgado, parado con una bandeja de comida — ¿podría sentarme aquí?
— Hay otras mesas. — señaló el moreno bebiendo la gaseosa.
— Lo sé pero...— sin esperar respuesta, el menor tomó asiento frente al mayor — Quería hablar contigo.
— Disculpa pero no te conozco. — comentó mientras dejaba la lata de bebida en la mesa y empezaba a tomar su bolso.
— ¡Espera! Solo quería agradecerte por lo de la otra noche.
— ¿De qué hablas? — Taehyung frunció levemente su ceño.
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Vmin - Magnetismo
RomansaTras una etapa cerrada, se comienza abrir otra para Park Jimin (18), un joven estudiante universitario que elige el camino de la música para aprender y vivir de ello en un futuro. A medida que los días transcurren, el castaño no sólo descubre un nue...