"Postales de amor." - Wandanat (g!p)

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Wanda M.

El tono de llamada en mi teléfono me desconcierta. La cabeza duele y por mucho que intento estirar la mano no consigo alcanzar el móvil, sin darme cuenta he atrapado algo entre las manos, pero es bastante mucho más suave que un móvil.

- ¿Qu-

Me remuevo asustada sobre mi lugar, entonces mi espalda se golpea contra el suelo del auto, al abrir los ojos totalmente puedo observar con claridad. No estoy en mi casa, y lo que mi mano sujetaba no era un móvil, sino las tetas de Carol. Antes de que pueda levantarme, ella decide girar y su cuerpo cae sobre el mío.

- ¡OUCH!

- SI, OUCH – coincido – debo irme, Carol, ¿puedes levantarte?

La rubia me mira con cara de pocos amigos.

- Yo te llevaré, ¿en dónde te estás quedando?

- Tribeca – digo – no está muy lejos de aquí.

Carol me lanza mis pantalones mientras ella se coloca el vestido. Ambas bajamos del auto un poco descompuestas para cambiarnos hacia los asientos delanteros. Mi móvil cae de nuevo contra la acera, pero aún continúa sonando, no puedo ver la pantalla porque se ha jodido así que no se quien es, ignoró la llamada asumiendo que se trata Happy pero a la mitad del camino vuelven a llamar.

- Creí que estaba hecho mierda – dice Carol.

- Lo está, creo que son llamadas fantasma – bromeó... - la tomaré – ella asiente y continúa en lo suyo, quien responde al otro lado de la línea es Happy.

"¿Dónde estás? la cita era hace dos horas"

Casi medio día, mierda.

- Oh, yo... fue el vuelo, que, se retraso tanto, pero... ya estoy llegando a casa, quizá podríamos hablar con-

"Sorpresivamente también le ha dado por no llegar puntualmente, su agente la pospuso hasta media tarde."

- ¿Entonces, por qué tan molesto?

"No da buena imagen que nuestra abogada se desaparezca, la cliente es especial."

- Bien, me daré un baño y estaré ahí tan pronto como pueda.

Happy cuelga la llamada, enojado.

- ¿Has probado comer en The greek on main?

- No, no, soy nueva en América.

- ¿De qué hablas?

- Mi acento, Carol, ¿no te parece raro?

- Un poco, sí.

- Soy de Sokovia, me mudé apenas ayer y después te conocí, y bueno, aquí estamos.

- Sokovia... interesante, te llevaré a almorzar y después eres libre.

- ¿No trabajas o algo como eso? Te ves relajada.

- Oh, no, justo después de que te dormiste libere mi agenda hasta las 6 de la tarde, es lunes, no deberíamos preocuparnos tanto.

- Me agradas – digo.

Carol se carcajea mientras el auto se adentra en una especie de drive thru cerrado.

- Menos mal, estaba preocupada de que no quisieras mirarme.

Ruedo los ojos mientras ella estaciona el auto en el pasillo.

- ¿Esta es tu idea de almorzar, en un sitio de esos de terror? Creo que la entrada estaba del otro lado, Carol.

Un grupo de chicas con el uniforme del lugar aparecen, y directamente se acercan a saludar a la rubia con entusiasmo.