"Postales de amor." - Wandanat (g!p)

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Wanda M.

La primera noche con Oli ha sido todo un evento histórico, no ha llorado mucho, de hecho, tomo leche todo el tiempo en que Carol y yo cenábamos, mientras él comía... Yo le daba bocados a su madre, si, nuestra primera cena en familia y creo que salió bien.

Por la mañana Carol sale caminando, como si nada, realmente es una campeona, se lo he dicho.

Bastantes medios esperan fuera del hospital, eso me aturde un poco, pero ella lo lleva mejor, Oli va cubierto en un taquito contra mi pecho, viste un juego de osito que mi madre le ha tejido, creo que se ve hermoso. Lorna va pegada a mi hombro, no puede dejar de observarlo. Al salir puedo ver a mi padre a lo lejos, él se ha ofrecido a conducir.

- Tony, ¿Qué tal? - saluda Carol.

- ¡Felicidades, hija! Lo hiciste como una estrella.

Carol lo abraza como si fuesen grandes amigos, yo ruedo los ojos, está sensible porque acaba de dar a luz. Pepper me mira sugerente, se lo que quiere, que le dejé a Tony conocer a Oli, pero no lo haré, paso a su lado y lo cubro más, aún no merece conocerlo, aún no.

Al llegar a casa todos insisten en quedarse con nosotras, pero Carol no los deja. Es mejor en pareja.

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- ¿Te has llenado, mi niño? - un puchero se forma en el diminuto rostro de Oli, él se remueve en los brazos de Carol y un poco de leche chorrea de sus labios.

- Si, me parece que lo ha hecho.

Carol bosteza mientras lo pone contra su pecho.

- Le sacaré el aire yo, está bien, descansa... Lo necesitas.

Carol sonríe apenada y me lo entrega.

- Si me duermo temo no despertar pronto - admite.

- No importa, creo que me las puedo ingeniar.

- Despiértame cuando vuelva a llorar, tú también te has desvelado conmigo.

- No lo haré - digo.

Carol se acomoda en la cama, y sin dejar pasar mucho más tiempo, se duerme.

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Después de haberle sacado el aire, decidió que era buen momento para hacer popo, es gracioso, sus nalguitas son diminutas y le gusta hacer soniditos mientras lo cambio.

Yo miro un capítulo de supercampeones en la sala mientras él descansa en mis brazos, creo que le gusta también, esa es la intención.

Un par de horas después, ha caído totalmente dormido. Camino hasta la habitación y me hago un lugar a lado de Carol, Oli encaja perfectamente entre ambas. Creo que es mejor dormir los 3 juntos, así, Oli puede recibir el doble de atención.

Mi hijo es hermoso. Oliver es hermoso.

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Natalia R.

- La mayoría de los niños no nacen con cabello - cuenta mi madre.

Ambas vamos en la parte trasera de la camioneta. Jojo conmigo, por supuesto.

- Eso pensé, pero, mi cabello es hermoso también, tuvo que sacarlo de mí.

- ¡Es hermoso, hija, estoy muy feliz por ti! Los hijos son una bendición, lo son, no dejes que nadie te diga lo contrario.

"¿Las bendiciones se abandonan?" Quise preguntar, pero no me atreví.

Está bien si se marcha. Ya soy una mujer adulta que puede cuidar de sí misma... sin embargo, ¿no podría dormir conmigo una sola noche?