"Postales de amor." - Wandanat (g!p)

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Natalia Romanova.

- ¡Nos falta una última cosa! - Yelena aparece por la puerta del salón con un karavay enorme – nuestra grandiosa tía nos hará los honores... ¡Esti!

Kate hace una seña tras Yelena indicando que está un poco ebria, pero eso podemos notarlo todos.

Que los novios coman del karavay en el día de la boda es algo importante.

- ¿Para qué es eso, Nat?

- Riqueza y prosperidad, viene desde los tiempos paganos.

- Quien tome el pedazo más grande es quien manda en la relación, usualmente es el novio... Mi cultura es misógina y hermosa, ¿Qué piensan?

Cubro la boca de Yelena con un pedazo de pastel, ella lo traga y guarda silencio.

-Bueno, ¿Quién toma el pedazo más grande? - Pregunta Esti.

Wanda suspira y se lleva a la boca un pedazo pequeño.

- Eres tú quien atrapa a las arañas en la madrugada, sería injusto tomar el pedazo grande.

Mi hermana estalla en risas y sube sobre la espalda de Wanda.

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Wanda M.

- ¿Quieres probar? Es 100% ruso – niego depositando un beso en su mano, Nat vacía sobre su boca la botella de cristal – bueno, yo quería darte coraje. La siguiente canción es nuestra, quiero que la bailes conmigo.

- Me gusta este género, es como las ventajas de ser invisible.

Nat ríe viendo hacia al frente y acomoda su vestido. El sonido de la música disminuye poco a poco hasta desaparecer, las luces se van y es solo lo claro del atardecer colándose por las ventanas lo que tenuemente alumbra el lugar. La banda desciende del escenario, una mujer rubia camina a través de las personas y se posa sobre el piano, todo el mundo permanece en completo silencio. Giro hacia mi izquierda para tratar de descifrar si es Taylor, pero no, ella continúa sentada con su esposo, la tía Esti y Oliver... Si alguien a mis 15 me decía que iba a vivir este futuro ficticio le hubiese dicho que utilizara esa imaginación para escribir un fanfic.

- Es Adele, cariño, sé que la duda te vuelve loca.

- ¿ADE-

Nat deja un beso sobre mis labios haciéndome callar.

- Si, si, no grites. La conocí en la fiesta de Lana, ella también vendrá más tarde.

- Taylor, Adele, y Lana. ¿Estás loca?

- Adele me pidió amablemente que me encargue del diseño de su nueva mansión después de ver los sets que montamos, yo le pedí que cantara en mi boda.

- ¿Y Lana?

- No sé, Carol se encargó de ella y de Taylor.

Con la garganta totalmente seca me pongo de pie y sigo a Nat hasta el centro de la pista de baile, no deja de sonreír, incluso tiende a tropezar un poco así que debo sostenerla. Hay algo especial en su mirada cuando se emborracha, algo que me hace querer cuidarla cada día.

- Wanda, mi amor... ¿Sabes cual es una de las razones por las que decidí pedirte matrimonio? Porque los votos me parecen magníficos... Dedicar semanas y meses a pensar en las palabras exactas que deseas pronunciar en voz alta delante de una multitud de rostros conocidos para que se enteren, de manera superficial, de la fuerza, y valor del amor que sientes por otra persona. Eso era lo único que me parecía irremediablemente romántico del matrimonio. No dije nada en la capilla porque ese lugar no significaba nada para nosotras, nada para mí. Quiero hacerlo aquí, en este momento, frente a tu madre, frente a nuestros hijos. Quiero contarles exactamente por qué mi amor por ti es lo único que podría permanecer vivo hasta el final de los tiempos... "Transcurrieron los años. La agitada tormenta

dispersó los viejos sueños y al olvido entregué tu tierna voz, así como tus rasgos celestiales."

Natalia R.

Ella se acerca a tomar el micrófono, y parece estar pensando en sus palabras, creo que ella recuerda el poema exacto que estoy citando, y si lo hace, definitivamente no habrá manera en el mundo de que nos separemos de nuevo.

- "En cautiverio oscuro y tenebroso mis días en silencio se arrastraban, sin la deidad y sin la inspiración, sin lágrimas, sin vida, sin amor."

- "Mas ahora que el despertar llegó a mi alma, y de nuevo apareces ante mí, lo mismo que una efímera visión igual que un genio de belleza pura."

- "Y el corazón me late arrebatado porque en él nuevamente resucitan. La inspiración y la divinidad y la vida, y el llanto y el amor." - Wanda retiene el micrófono en su mano, y con nerviosismo esconde su mirada en la mía - Yo no soy la poeta aquí, esa eres tú. No podría escribir ni la mitad de una estrofa tan ideal como las que viven en tu mente, tú eres mi artista favorita, Natalia, me entrego a ti como un lienzo completamente nuevo y pulcro, y deseo que dibujes en mi lo que quieras, que hagas dibujos y que te salgas de la línea, amo la forma en que me amas, no cambiare de parecer.

- Recuerdo la calle en que nos vimos, la noche en que nos conocimos, y eso es mucho para alguien que no podía recordar la parte más importante de su vida unos muchos meses atrás. Creí que era tarde para todo, Wanda, para esto, para aquello... Para ti, el amor de mi vida, afortunadamente ahora sé que cada amanecer y cada anochecer que mis ojos puedan seguir apreciando, lo harán junto a los tuyos, y eso es un alivio enorme.

No quiero hablar más sobre el resto de cosas que fueron dichas esa tarde, todo el mundo acabó llorando. Incluso la pobre de Adele, es por eso que se bebió un mojito antes de comenzar a cantar.

( One and Only – Adele )

You'll never know if you never try

To forget your past and simply be mine

I dare you to let me be your,

your one and only

I promise i'm worthy to hold in your arms

So come on and give me the chance

To prove I am the one who can walk that mile

Until the end starts

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Los bailes grupales fueron dirigidos por David, y Yelena, las dos personas del grupo con la mejor actitud para cargar con una celebración en la espalda.

La fiesta fue de dos días seguidos con un corto intermedio para recargar las pilas, como debería ser. Loki y Thor llevaron los numerosos regalos a nuestra casa, y Kate se marchó con los chicos para dormir en la limusina... Los cuatro bebés del grupo durmieron sus ocho horas y eso.

Tony nos obsequió una increíble luna de miel en Italia, Carol se ha quedado con los chicos.

Wanda descansa desnuda sobre mi pecho, sus piernas entrelazadas a las mías, duerme plácidamente como un bebé. El reloj marca las 9, tenemos menos de una hora para alcanzar el desayuno.

Masajeo sus hombros con suavidad consiguiendo que despierte. Abre tan solo uno de sus ojos y lo cierra de golpe, lleva una de sus manos a mi seno y lo aprieta sin lastimarme. Acaricia mi cintura, y mi abdomen, antes de que su mano roce mi centro, puedo sentir a su miembro endurecerse contra mi pierna.

- Queda menos de una hora para el desayuno, amor.

Wanda se coloca entre mis piernas y deposita un beso en mi cuello, sus labios se desplazan por todo mi cuerpo, cierro los ojos dejándome llevar por el placer de tenerla encima mío.

No es que me importe mucho el desayuno.