Capítulo 80

9.5K 845 1K
                                    

Louis se sostiene a la nuca de Harry mientras sus labios son poseídos por la pasión que carga una boca ajena e insistente.

Los oídos le zumban como consecuencia de las inesperadas acciones de su jefe y de la rapidez con la que ha tenido que actuar para corresponderle con la misma velocidad y énfasis que ahora mismo emplea sobre él. Su cavidad sabe a pasta dental y su lengua a cereza y el muchacho tiene la oportunidad de mezclar ambos sabores cada vez que el rizado empuja el músculo de su boca hacia atrás, queriendo regresarlo hacia su cueva, deseando ser quien se apodere de todos sus rincones bucales en lugar de dejarlo explorar la calidez de su interior por primera en todos esos días que llevan en unión y que se han basado en besos que le roban el aliento y el poco razonamiento que logra tener estando a su alrededor.

Un quejido se le quiere formar en alguna parte de la garganta, la incomodidad de la posición que tiene en el asiento del coche lo está sacando un poco de quicio y si no fuera por la dulzura en esa boca ajena que le otorga el cielo con todas esas caricias, hace rato que se habría apartado con la intención de disminuir la tensión que le ha quedado en los músculos.

Sin embargo, se abstiene de realizar cualquier movimiento que no sea empleado por sus comisuras, especialmente porque a duras penas tiene la oportunidad de hacer cualquier cosa a causa del insistente agarre que el hombre de ojos verdes mantiene contra sus pómulos, sosteniéndolo por la barbilla con una sola mano sin mucho esfuerzo aparente, hundiéndole los dígitos en la piel para dejarlo en su lugar y que pueda continuar besándolo.

Se afianza un poco más a la nuca de su jefe para mantenerse más cerca de él, para consumirse a sí mismo en esas caricias que incluyen una lengua que no deja de arrinconar la suya para probar un punto del que el castaño no tiene la más mínima idea.

Los pulmones le resienten la falta de oxígeno, su rostro arde en el fervor de sus caricias, la parte baja de su espalda pasa por el Niagara en bicicleta, el calambre en su muslo derecho está comenzando a convertirse en un hormigueo doloroso que eventualmente será incapaz de soportar y tiene este pinchazo en la esquina de la cadera que ya no aguanta y que sirve como la gota que derrama el vaso para quebrantar con la unión de sus pieles bucales.

La diferencia de distancia no es tan grave pues el castaño recuesta la frente sobre la de su superior mientras respira en voz baja, inhalando y exhalando con profundidad hasta que se marea.

Las fosas nasales se le llenan con el aroma matutino del recuerdo de una colonia que podría haber quedado en el olvido, mezclada con una vestimenta que no sabe de dónde el rizado ha sacado al no ser la que utilizó la noche anterior para cenar con él. Ni siquiera tiene cabeza para cuestionarse si ha regresado a su casa tan solo para emprender un viaje de vuelta para ir a recogerlo, pues está un poco ocupado perdiéndose en el modo en que Harry le repasa el pómulo con el pulgar una y otra vez, tranquilo, silencioso, apoyado en su cabeza como si estuviera intentando intercambiar palabras con su mente en un lenguaje que nadie en el mundo ha podido desarrollar hasta ahora.

Louis podría vivir de este instante si fuera posible. Si fuese capaz de elegir un segundo de su vida para repetir en un bucle infinito probablemente elegiría este, pues el tacto y la cercanía de su jefe son acogedores y se sienten como estar tirado en una pradera durante el nacimiento de una brillante y esplendorosa primavera.

Respira con nueva suavidad y Harry hace lo mismo, la diferencia es que su inhalación sirve para tomar la palabra.

—Louis —llama en un murmullo de terciopelo rojo inconfundible, tan bajo y grueso y arrastrado en ese acento inglés con tintes de su pueblo natal que el castaño por poco se estremece al todavía no haberse acostumbrado del todo a escucharlo pronunciar su nombre.

Make daddy proud I ✦ daddykink! [ls] | ✓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora