Capítulo 44

10.8K 1.1K 1.6K
                                    

El viaje en ascensor no llega a ser incómodo, en absoluto. Louis es quien presiona el botón y en un santiamén las puertas de acero se encuentran abriéndose para recibirlos. Se suben, siendo los primeros en introducirse, quedando en la parte trasera mientras los demás pasajeros toman su sitio para poder bajar de la misma manera en la que lo hacen ellos.

—¿Podría presionar el segundo sótano, por favor?— Pide en voz baja el mitad inglés al sujeto que está más cerca de la barra de control.

—Seguro— Responde, y el pelinegro termina murmurando un agradecimiento tan pronto como realiza la acción.

Wyatt vuelve a un lado de Louis, un poco más cerca, hasta que sus brazos se rozan y ese mismo hormigueo vuelve a hacerse presente en alguna parte de su pecho. El castaño le echa un vistazo, y se muerde el labio inferior cuando en serio le puede llegar a gustar lo que mira, y tiene sentido que lo haga, porque no hay nada que le parezca más atractivo que una mandíbula divinamente marcada y unos pómulos delgados que podrían cortar hasta el más grueso de los silencios, curvándose de forma exquisita hasta hacer la conexión con su barbilla, y estas pestañas tan largas y oscuras que no dudan ni un solo pestañeo.

Ni siquiera quiere pensar en la forma en la que su cabello cae en mechones delgados que enmarcan todo el contorno de su increíble rostro, tan fuerte como él y el resto de su presencia, porque no es justo, y lo puede decir un millar de veces de ser necesario.

Es tan guapo que duele, allí en su pecho, en su espíritu que horas antes ha estado agonizando por la pena de otro hombre que en esos momentos no tiene remedio ni consuelo.

No puede hacer nada por él, pero Wyatt, su admirador, es toda una historia diferente.

—¿Te estás divirtiendo?— Murmura el coreano, inclinándose hacia él para que pueda escucharlo. Louis casi pega un respingo y se muerde el labio inferior sintiendo como el calor sube a su rostro por la vergüenza de haber sido atrapado en el acto. —¿Tengo algo interesante en la cara?

El ascensor se detiene en el primer sótano, y la mayoría de las personas que han estado presentes se desmontan del elevador, despidiéndose en una voz baja y con educación apreciable. De alguna forma, y cuando las compuertas se vuelven a cerrar, solo quedan ellos dos, y el abogado de ojos azules no sabe cuántos empleados han estado allí en primer lugar.

Ha debido de prestar atención, pero tampoco se juzga por no haberlo hecho.

—La verdad es que sí— Responde el castaño con cierto descaro, dándole un pequeño empujón con el codo que no tiene ningún efecto cuando no consigue que se mueva.

De cierto modo, a Louis se le contrae un poco el abdomen cuando se da cuenta de que en serio no tiene posibilidades contra él, y por un instante, en el mismo en el que las puertas vuelven a abrirse porque ya han llegado a su destino, se da cuenta de que él en serio tiene un tipo de hombre y que Wyatt encaja dentro de la categoría perfectamente.

Es un alivio tener tan buen gusto, así que no se martiriza por seguir un patrón. Es uno muy bueno.

Se baja primero antes de que las compuertas se junten, y escucha el traqueteo de los zapatos contra el asfalto detrás de él. Es silencioso cuando el pelinegro probablemente está viéndolo por detrás, y Louis ni siquiera sabe por qué lo duda si es capaz de percibir aquella oscuridad en su columna, deslizándose hacia abajo hasta culminar en esa curva deliciosa que sus largos dedos han repasado con entusiasmo.

Sería una mentira decir que no se encuentra repentinamente azorado por la intensa sensación, porque es verdad, porque tiene ese calambre ardiente en la boca del estómago que lo obliga a respirar profundamente y a fingir que no lo nota, que es despistado del hecho de que está siendo devorado y engullido en la distancia.

Make daddy proud I ✦ daddykink! [ls] | ✓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora