Lo mantuvo en sus brazos hasta que se calmó del todo. HoSeok le había colocado un durumagi por encima de los hombros al alfa y este había sostenido a JungKook hasta sentarse en un sofá y colocarlo en sus rodillas cómodamente hasta que sus lágrimas dejaran de brotar inevitablemente. El alfa tendría toda la paciencia del mundo para el menor de sus omegas. Se había llevado un gran susto con la presencia de su padre y con sus palabras malintencionadas. Tenían cosas que aclarar, pero esperaría a que su corazón dejara de sentirse encogido como reflejo del de JungKook.
- Ya... mi pequeño... - Dijo acariciando su pelo. - Nadie te va a hacer nada malo si estás conmigo. No lo permitiría. - JungKook se aferró al durumagi de su alfa aún con más fuerza.
- Si entierra la cabeza más en tu pecho, NamJoon, el niño va a terminar fusionándose contigo. - Bromeó TaeHyung sólo haciendo que JungKook se encogiera aún más.
- No digas esas cosas, Tae. - Le regañó JiMin con dulzura. - El pobre se llevó un buen susto.
- Kookie, cariño. - Habló NamJoon con calma. - ¿Podrías contarme lo de esa enfermedad, por favor, amor? - JungKook levantó la mirada un momento y luego volvió a enterrarse en el pecho de su alfa.
- Yo... - Susurró. - No es hereditaria. Te lo prometo. - Empezó diciendo.
- Eso no es lo que me preocupa. - Aseguró el alfa.
- No quería mentirte. Te prometo que ya estoy bien.
- JungKook. - Le acomodó aún mejor en sus piernas. - Escucha bien. - Limpió sus lágrimas con absoluto cariño. - Necesito que me cuentes qué te ocurre. Aunque te sientas saludable ahora, si algún día te ocurre algo malo... - Le abrazó con fuerza casi con miedo. - Entiende que necesito saber cómo reaccionar si alguna vez te sientes mal. ¿Comprendes eso, mi vida? - Para él el problema no era que fuera hereditaria y eso podría acarrear problemas al hijo que quería tener con él en el futuro. Ya se encargaría de lidiar con eso si ocurría, pero ahora estaba preocupado por su omega. JungKook asintió despacio.
- Es... la enfermedad del azúcar. - Confesó finalmente.
Todos se mostraron confundidos.
- ¿Azúcar? - Se extrañó HoSeok.
- ¿Por eso tu aroma es tan salado? - Se le ocurrió preguntar a TaeHyung, a lo que JungKook se encogió de hombros.
- ¿Te refieres a que eres diabético? - Preguntó YoonGi.
- ¿Dia...bético...? - Pronunció JungKook. Parecía no haber escuchado esa palabra jamás en su vida.
- ¿Eso es grave? - Quiso saber NamJoon.
- Puede serlo, sin duda. - Expresó Jin. - Pero es una enfermedad muy bien estudiada. Hay muchos tratamientos, muchas formas de sobrellevarlo.
JungKook finalmente levantó la mirada hacia los demás omegas.
- ¿En serio? - Preguntó.
- Es una enfermedad muy común. - Añadió YoonGi. - Una de mis compañeras de clase la padecía y llevaba una vida completamente normal. Sólo tenía que pincharse insulina y medir su azúcar y eso.
- ¿Insulina? ¿Qué es eso? - Preguntó TaeGyung curioso. YoonGi no entendía nada, ¿cómo era que no sabían lo que era la diabetes?
- Es común entre humanos, YoonGi. - Puntualizó Jin. - Pero no entre cambiaformas. - Explicó.
- Pero, aún así, ¿cómo puede ser que nunca hayas oído hablar de ella, JungKook? Más aún sufriéndola. - Quiso saber YoonGi. - ¿Es que nunca fuiste a un hospital?
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La Manada [BTS]
FanfictionEn el bosque de Bukhansan, la manada de Kim NamJoon vive en armonía. Él cuida de betas, omegas y cachorros. Cada uno tiene su lugar y nada parece capaz de perturbar la paz de la manada. Pero un omega de ciudad, que no comprende nada de su propia na...