Capítulo 57

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Isabella

Seguimos avanzando por la mansión, intentando salir al exterior. No obstante las explosiones han parado y los guardias que nos vamos encontrando por el camino no nos atacan, al contrario nos siguen tan tranquilos.

Solo algunos hacen el intento de atacarme, pero rápidamente son asesinados por los que me acompañan. Esto solo me hace pensar en una cosa...

«¿Cómo de persuasivo tiene que ser Khalid para convencer a la mayoría de los hombres de Viktor que se rebelen contra él?»

Si hay algo que caracteriza al mundo de las mafias es la gran filedidad de los miembros que hay en ellas, pues todos son coscientes que a la más mínima sospecha de traición serían asesinados. Sin embargo, Khalid a logrado que todos le apoyen a él, lo que demuestra la gran astucia que tiene.

«Menos mal que ahora es nuestro aliado, porque creo que sería un adversario difícil de vencer»

Por fin logramos llegar a una de las puertas laterales de la casa, por donde salimos a los jardines. Puedo ver cómo algunos de los helicópteros de mi padre y los Olímpicos han aterrizado, mientras que otros se dedican a rodear la mansión.

Avanzo seguida por todos los hombres, aunque en seguida somos interceptados por los de mi padren, que apuntan sus armas en nuestra dirección, incluso un helicóptero hace los mismo. Inmediatamente, veo a Zeus, Malek, Apolo, Horus y Ares allí.

Siento unos enormes deseos de salir corriendo y abrazarles, pero uno de los hombres de Viktor me agarra del brazo.

- Necesitamos asegurarnos de que no nos van a atacar cuando vayas con ellos.- murmura.

Asiento comprendiendo su postura. Sigo avanzando con ellos hasta que quedamos a una distancia prudencial.

- No creo que sea muy inteligente amenazar a mi hija.- espeta mi padre.- Estáis rodeados por mis helicópteros, vuestros misiles están destruídos.- añade.- No vais a ganar.-

- Si quisiéramos matarla ya lo habríamos hecho.- responde el que me agarró.- Solo queremos que prometáis que no nos haréis daño.- indica.- Los que estamos aquí no hemos luchado contra vosotros.-

- Es cierto papá.- intervengo.- Ellos me han protegido y me han ayudado a salir.-

- ¿Por qué haríais eso?- interrumpe Zeus.

- Estamos cansados de los maltratos de Viktor.- responde Vlad.- Un verdadero líder cuida de los suyos.-

- ¿Por qué no se lo aclaráis?-

Todos miramos hacia la izquierda y puedo ver a Viktor avanzando con las manos en alto, mientras Khalid le sigue apuntándole con una pistola. Pero es no es todo, los dos enormes tigres, uno anaranjado y uno blanco, también vigilan al rubio.

Automáticamente, el tigre que estaba junto a mi padre avanza hasta quedar con los otros dos, mientras que Destino se acerca junto a mí y se sienta a mi lado.

- También te extrañé pequeño.- murmuro con una pequeña sonrisa.

- ¡Malditos bastardos!- grita Viktor.- ¡Por qué carajos no habéis atacado!-

- Ya no te seguimos a tí.- espeta Vlad.

- Hicisteis un juramento de seguir y dar vuestra vida por los Vólkov.- replica el rubio.- ¡Y yo soy el último descendiente!-

- Eso no es cierto.- dice una voz femenina.

Miro hacia el helicóptero principal y veo salir a Stella, la cual avanza hasta quedar junto a Ares.

Entre diosesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora