Sin conocerte

CAPÍTULO 12

-¡Eres un egoísta Yoo Changkyun! ¡¿Cómo te atreves a asustarme de esta manera?! ¡¿Sabes lo preocupado que estaba?! ¡Estuve a punto de llamar a la policía! ¡¿No tienes nada que decir?! ¡¿No me darás una explicación?!

-Lo haría si me dejaras hablar Ki... - dijo Changkyun con una sonrisa.

-¡¿Qué te hace tanta gracia?! ¿Mi preocupación? Porque de una vez te advierto que si sales con la excusa de que tú eres mayor y puedes hacer lo que quieras estás muy equivocado...

-Pasé la noche en casa de un hombre... - dijo Changkyun tranquilamente.

-¡¿Qué?! ¡¿Qué hiciste qué?!

-Ki...

-¿Quién es? ¿Lo conozco?

-No, no lo conoces y en realidad yo tampoco... bueno solo conozco su nombre...

-¡¿Estás diciendo que pasaste la noche con un desconocido?! – dijo Kihyun atónito y Changkyun se encogió de hombros mientras su sonrisa se hacía más grande. – Pero, ¿en qué estabas pensando Changkyun?

-Estaba pensando en lo sexy que era...

-Eres un...

-Vamos hermanito... deja de preocuparte demasiado – dijo Changkyun poniéndose de pie. – Reconozco que hice muy mal en no avisarte y lamento haber hecho que te preocuparas, de verdad... pero sinceramente, no me arrepiento de lo que hice...

-¿De qué hablas?

-Hablo de que anoche tuve el mejor sexo de toda mi vida...

-¡Changkyun!

El aludido sonrió ampliamente y soltó una carcajada, Kihyun frunció el ceño pero no pudo reprimir su sonrisa por más tiempo.

-Estás demente hermano...

Changkyun sonrió divertido.

-Tal vez, pero, ¿sabes algo? Podría morir de dolor en este preciso momento y no me importaría nada, moriría completamente satisfecho.

-Eres un sinvergüenza...

Kihyun acompañó a su hermano y lo dejó solo en su habitación, al fin, la preocupación se había ido.

Los días pasaron rápidamente, a Kihyun le iba de maravilla en el restaurante, pues, además de que el chef Park resultó ser un hombre bastante amable y humilde quien no dudó en compartir todo su conocimiento con él, salía temprano de su trabajo y llegaba a casa para disfrutar más tiempo a su hijo. Las cosas no podían marchar mejor, al fin podía cumplir una promesa a Wonjin, y por fin podía verlo verdaderamente feliz.

Algunos días después, Changkyun arregló la inscripción de Wonjin en su nuevo colegio, y fueron juntos a conocer las instalaciones de la escuela. El niño quedó fascinado con lo que vio porque definitivamente ese lugar era más grande que su antigua escuela, pero no se sentía emocionado por convivir con nuevos niños.

Changkyun por su parte, desde su noche apasionada con Jooheon, no había dejado de mantener contacto con él. Pasaban las tardes intercambiando mensajes y realizaban una que otra llamaba al día. Sin embargo, no habían sido capaces de reunirse de nuevo, cada vez que acordaban verse, uno de los dos tenía trabajo que hacer.

El primer día de clases llegó, Wonjin trataba de controlar sus nervios, pero le resultaba muy difícil.

-¿Qué pasa bebé? No has tocado tu cereal lo cual no es normal en ti.

-Nada papi, estoy bien...

-¿Estás nervioso? – preguntó Kihyun enternecido.

-Un poco papi.