CAPÍTULO 23

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Changkyun y Jooheon llegaron al apartamento del primero, cerraron la puerta y Jooheon comenzó a observar el lugar con mucha curiosidad, agarró un porta retratos y lo miró.

-¿Sabes? Ahora que veo con detenimiento a Wonjin puedo decir con exactitud los rasgos físicos que heredó de Hyunwoo – dijo Jooheon tranquilamente. – Las cejas y los labios son idénticos a los de él...

-Lo se – respondió Changkyun entregándole un vaso con agua. – Siempre dije que esos rasgos no eran de Kihyun... los rasgos físicos que heredó Minhee de mi hermano son los ojos y la sonrisa...

-Así es, siempre le dije a Hyunwoo que definitivamente esa sonrisa no era suya – dijo Jooheon colocando la foto en su lugar y después le dio un trago al agua.

Changkyun sonrió alegre, se sentó en el sofá y Jooheon se sentó a su lado.

-¿Qué crees que decidan nuestros hermanos? – dijo Jooheon mirándolo.

-Lo más probable es que Kihyun acepte el consejo que les dimos, ese mocoso es más sentimental de lo que aparenta y tratándose de sus hijos no dudaría en ir al mismísimo infierno si es que lo tuviera que hacer... - Jooheon sonrió. – En cuanto a Hyunwoo, tú deberías saberlo, es tu hermano...

Changkyun miró a Jooheon a los ojos esperando su respuesta, pero éste desvió la vista al frente.

-A diferencia de Kihyun y tú, Hyunwoo y yo somos más cerrados en cuanto a nuestros sentimientos, y eso se debe a que ambos somos un poco tímidos y torpes para demostrarlos...

-¿Por qué?

-Por nuestros padres, ellos siempre fueron muy estrictos y se concentraron más en darnos la mejor educación que mostrarnos un poco de cariño, lo cual, obviamente no fue malo porque gracias a eso Hyunwoo mantiene el negocio familiar, pero yo no pude lidiar con eso, lo cual me llevó a convertirme en la oveja negra de la familia – explicó con una sonrisa ladina. – Lo peor vino cuando me rehusé a seguir sus instrucciones y decidí tomar mi propio camino...

-Tus padres deben de estar locos para no ver la suerte que tienen al tener un hijo como tú...

Jooheon sonrió tiernamente y se acercó un poco a Changkyun.

-¿De verdad lo crees?

-Sí, si no, yo no estaría tan encantado contigo... - dijo Changkyun acercándose también a él.

Jooheon sonrió y lo abrazó fuertemente.

-Gracias – dijo en un susurro. – No sabes cuánto significan tus palabras para mí...

Changkyun se separó un poco, se miraron a los ojos sonrieron y acortaron la distancia para besarse, sus movimientos eran lentos y dulces, pero ambos estaban ansiosos y necesitados. Changkyun se subió a horcajadas al regazo de Jooheon sin interrumpir el beso, le pasó las manos por su nuca y se pegó más a él. Jooheon por su parte, le acariciaba toda la espalda, bajó las manos por sus caderas hasta llegar a su trasero y lo apretó ligeramente provocándole un gemido. Le pasó la punta de la lengua por sus labios y Changkyun los separó un poco, Jooheon le metió la lengua y la de Changkyun la recibió con la misma pasión.

Continuaron besándose mientras que Changkyun comenzó a moverse de atrás hacia adelante muy lento. Jooheon le desabrochó un par de botones de su camisa, se separó y besó su cuello de ambos lados, mordisqueó y chupó suavemente sin hacer marca mientras le desabrochaba el resto de los botones, Changkyun seguía con sus seductores movimientos y al mismo tiempo metía las manos por debajo de la playera para poder sentir su piel ardiente.

Se separaron para poder despojarse de sus prendas de arriba pero inmediatamente volvieron a besarse con más pasión. Jooheon lo colocó contra el sofá y se acomodó en medio de sus piernas mientras que Changkyun le rodeaba la cintura con ellas. Jooheon comenzó a besar de nuevo su cuello, bajando lentamente a sus pectorales, deteniéndose un poco en sus pezones para lamer y chupar mientras Changkyun gemía de placer y frotaba su miembro contra el de Jooheon por encima de la ropa.

Sin conocerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora