10

2.8K 288 24
                                    

El sol se iba yendo, así que entramos todos en casa, me llevé a mi pequeña para bañarla y ponerle el pijama.

A las ocho que era la hora de la cena, estamos todos en el comedor, Brainy trajo la cena.

—Brainy, esto está delicioso. —dijo Kara.

—Me alegra que te guste.

—Tuvo que hacer un curso para ser un buen mayordomo, además que le pagué las clases de cocina.

—Dinero muy bien invertido.

—Tú nunca cambiarás. Siempre te gustó comer. —dijo Brainy.

—Pues sí.

Después acosté a mi princesa y le di las buenas noches, se durmió enseguida, estaba muy cansada. Después me despedí de mis otros dos tesoros.

Cuando iba a mi habitación, una puerta se abrió y apareció Kara.

—Lena, ¿puedes venir un momento? —me preguntó.

—Claro. —entré y cerré la puerta. — ¿Qué ocurre?

— ¿Qué es esto? —preguntó señalando la caja grande. —Cuando vine no estaba.

—Es una mesa de dibujo.

— ¿Qué?

—Te he comprado una mesa de dibujo.

—Lena... —se estaba quejando pero no la dejé continuar.

—Kara, te gusta dibujar siempre te ha gustado y estoy convencida que no has dejado de hacerlo. Cuando los niños estén en clase o en cualquier momento que tú desees, puedes seguir dibujando. Me estás ayudando con mis hijos y por ello no quiero que te prives de lo que te gusta hacer ¿entiendes?

—Sí. Gracias.

—No gracias a ti. Hoy has hecho algo maravilloso, ayer también por supuesto, pero con Kieran en la piscina ha sido muy especial.

—Lena intentaré poco a poco que ellos estén cómodos y felices, me centraré en cada uno de ellos y siempre haré lo que ellos quieran como ha hecho Kieran hoy. No voy a obligarles nada, tiene que venirles de dentro y si quieren hacerlo conmigo no les diré que no.

—Gracias. —nos abrazamos. —buenas noches.

—Buenas noches.

Me fui a mi dormitorio y me puse el pijama, dejé el traje en la silla para que Brainy lo lavara al día siguiente.

Una vez en la cama envié los videos de mi madre y a mi hermano, también se lo envié a Sam.

Apagué el teléfono y me dispuse a dormir, estaba cansada entre que dormí poco la noche anterior y con todas las emociones que había tenido en el día, estaba agotada.

A la mañana siguiente, me levanté descansada, encendí el teléfono, se volvió loco tenía un sinfín de notificaciones, los miré y eran mensajes de mi madre, de mi hermano e incluso de Sam.

Suspiré porque sabía lo que me esperaría si los llamaba, así que tranquilamente me metí en el baño.

Kara PV

Me despertó el dichoso teléfono, contesté poco después de localizarlo.

— ¿Diga? —dije con voz de dormida.

Kara, has hecho algo maravilloso. —aparté el teléfono de la oreja y traté de enfocar mirando la pantalla, quería ver la hora.

—Alex ¿sabes que son las seis de la mañana?

La niñera (supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora