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Kara PV

Había estado dos días en el hospital, al fin nos dieron el alta, así que Lena y Alex me ayudaron a vestir a los niños mientras yo me vestía. Después Lena se marchó a recoger el coche y diez minutos después estaba delante de la puerta de urgencia con la puerta abierta. Alex y ella colocaron a los bebés en las sillitas y yo dejé las bolsas en el maletero.

Mi hermana y yo nos abrazamos y después me monté en el vehículo, Lena también abrazó a mi hermana y después nos dispusimos a ir a casa.

Durante el trayecto iba mirando atrás, aún era un sueño ver a mis niños, estaban ahí, eran reales.

Cuando llegamos a casa, Frank nos ayudó con las cosas, cogí a Leo y Lena a Katie y entramos en casa.

— ¡Sorpresa! —gritaron todos, yo no sabía que decir ni cómo reaccionar ante eso.

Habían preparado una fiesta para dar la bienvenida a Leo y a Katie, estaban todos nuestros amigos, menos Laurel y Alex que tenían trabajo.

También estaban nuestra familia, Lex y Clark se acercaron para poder conocer a los mellizos, ya que no pudieron venir cuando estábamos en el hospital.

—Son preciosos. —dijo Clark.

—Es que Lena sabe hacer buenos niños, sino mira a mis sobrinos. —dijo Lex con orgullo.

Nos dejaron acercarnos al resto de la familia que estaba en la sala de estar, se apartaron y fui directa al sofá, estaba cansada.

— ¿Estás bien? —preguntó mamá.

—Sí, solo cansada.

—Es normal, trabajaste mucho el día del parto, tu cuerpo aún no se ha recuperado.

Lena se sentó a mi lado con la niña y después todos se acercaron.

—Chicos, todo esto ha sido una sorpresa sin duda, no lo esperábamos. —dijo Lena.

—Gracias.  —dije. —Quiero que conozcáis a Leo y a Katie.

Le pasé el bebé a su madre que estaba más cerca, y Lena se lo entregó a Caitlin.

Las dos se acercaron al grupo para que pudieran conocerlos.

—Dos miembros más del grupo. —dijo Barry.

—Sí, tendremos que enseñarles como defender a sus hermanos. —dijo Sara.

Giré los ojos por las ocurrencias de los chicos, miré a Lena que solo sonreía.

—Se verá raro que dos niños pequeños protejan a sus hermanos mayores. —le dije al oído.

—Pero son como tú, así que seguro que conseguirán algo. —me besó. —gracias por esto, hace mucho tiempo que me rendí a ser feliz y ahora... tengo cinco hijos preciosos y el amor de mi vida conmigo. Además de tener a nuestros amigos y familia aquí, todos juntos, festejando la llegada de nuestros hijos.

— ¿Eres feliz? —le pregunté.

—Muchísimo. ¿Y tú?

—También lo soy.

—Me alegro que no aceptaras ser la niñera de los niños.

—Yo también. —nos besamos de nuevo y después vimos como hablaban todos mientras miraban a los mellizos, también vi a Brainy abrazar a Nia. Algo me decía que la cosa iba en serio y que era posible que Brainy se casara con ella, pero me entristece imaginar que nos dejará para hacer su vida.

Kara no pienses en eso, aún no dicho nada, además si así fuera, tiene todo el derecho a ser feliz también.

Aún extraño a mi padre, pero sé que siempre estará en mi corazón y que hablaré de él a los niños para que lo conozcan, lo mismo que hicimos con los otros tres sobre Lionel.

Sin duda no podía desear algo mejor que esto.

En la noche, nos encontrábamos en la habitación de los bebés que era la continua a la nuestra.

Lena y yo hacíamos un buen equipo, ella les cambiaba los pañales mientras que yo les amamantaba. Los acostamos y nos quedamos allí mirando un rato.

—Lori, Lex y Kieran, eran mi luz y mi fuerza cuando eran así de pequeños. Me obligué a trabajar el doble para darles una buena vida, quería que lo tuvieran todo y fueran felices, pero no esperé que mis angelitos sufrieran tanto sin mí. Aunque estaba siempre en casa y los visitaba cada vez que tomaba un descanso, no podía imaginar que alguien de su familia pudiera ser tan malvado y cruel. —dijo Lena en voz baja. —ahora esa persona no está presente y mis hijos son felices gracias a ti, pero al ver a estos dos, el sentimiento que tuve con los tres, es el mismo. Quiero que tengan una buena vida y que sean felices.

—Estamos todos juntos, nunca sufrirán lo que sufrieron sus hermanos. Te prometo que los cinco tendrán una buena vida, aunque Lori, Lex y Kieran sean los mayores, siguen siendo niños y me encargaré que sigan teniendo una infancia feliz y después se convertirán en dos hermosas chicas, inteligentes y fuertes, nada podrá con ellas y un chico apuesto que siempre estará ahí para apoyarlas. Además de estos dos. —le cogí la mano y después nos fuimos a dormir.

—Te amo Kara.

—Yo también te amo. Os amo a todos, sois mi familia. —cerré los ojos y caí dormida enseguida.


Fin

La niñera (supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora