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Kara llevaba tres días tomando la medicación y cada día la veía con mejor cara, fui informando a Alex por mensaje para que estuviera tranquila.

Las correcciones del libro ya estaban hechas, llamé a Nia para que viniera a recoger el manuscrito. Se lo di a Brainy para que fuera él quién se lo entregara, estaba liada con los niños y con Kara.

Era por la tarde, todos ya habíamos comido incluido Kara, fui a verla como estaba así que me puse la mascarilla y llamé a la puerta.

—Adelante. —pude oír un poco, entré y me acerqué a ella.

—Hola, ¿Cómo estás?

—Mucho mejor y ahora menos aburrida porque estás aquí.— me sonrió, pero eso fue un problema para mí, porque su sonrisa es tan seductora, que ya ni siquiera se da cuenta de ello, quería besarla, pero no podía quitarme la mascarilla, aún.

— me sonrió, pero eso fue un problema para mí, porque su sonrisa es tan seductora, que ya ni siquiera se da cuenta de ello, quería besarla, pero no podía quitarme la mascarilla, aún

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Así que intenté cambiar de tema por mí bien, llevo mucho tiempo durmiendo sola sin ella y ya vivía las consecuencias de ello.

—Tienes a los niños preocupados. —le dije.

—Lo siento.

—Lo sé, no te preocupes, ellos están bien, y entienden porque no pueden verte. Se pasan el día dibujando para regalártelo después.

Miramos la cómoda que ahora era un lugar de exposición de arte, todos los dibujos y las figuras de plastilina que hicieron en el curso, estaban allí.

—Pronto podré levantarme y estar con ellos.

—No te excedas.

—No lo haré.

Estuve un poco más con ella y después me fui para dejarla descansar.

Kara PV

Después de esa mini conversación que tuve con Lena, habían pasado dos días, así que ya me sentía menos cansada y podía levantarme, pero aún no podía salir de casa, pero si podía estar con los niños, ya que mi constipado dejó de ser contagioso hacía un par de días.

Esta tarde me levanté, no quería exagerar el primer día, me juré que no volvería a enfermarme de esa manera, me había pillado desprevenida y me asusté mucho.

Me di una ducha y me cambié de pijama, salí de la habitación y escuché a todos hablar en la sala de estar, así que crucé el pasillo y bajé las escaleras, los niños me vieron y sonrieron, cuando ya estaba en suelo plano, ellos se acercaron corriendo y me abrazaron, yo los correspondí, también los había extrañado mucho.

Me acompañaron hasta el sofá, me senté al lado de Lena que solo sonreía, nos abrazamos por fin.

—Te amo. —le dije.

—Yo también te amo y me alegro verte levantada.

—Yo también, me estaba cansando de estar en la cama.

La niñera (supercorp)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora