Capítulo Veintisiete - Poco tiempo.

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Dejé el celular en la mesita de luz sin ninguna esperanza de que él conteste y bajé a cenar cuando mi mamá me llamó.

La comida fue en silencio, como todos los días, a veces me hubiera gustado llevarme mi plato y comer en mi cuarto, sin momentos incómodos como este. Pero no podía hacerlo, eso significaría un castigo bastante largo. Aunque no sé en qué me afectaría eso ahora. 

Me bañé, me puse el pijama y me acosté en mi cama esperando conciliar el sueño hasta que por fin, después de un rato de dar vueltas en mis propios pensamientos, me quedé dormida.

Pero un ruido me despertó en medio de la noche.

No pude reconocerlo hasta que prendí el velador y vi de donde provenía. Era mi celular, que estaba vibrando sobre la mesa, y mostraba la foto de Harry en la pantalla.

Me estaba llamando.

Aclaré un poco mi voz antes de agarrar el teléfono y apretar el botón para contestar.

- ¿Harry? - Dije tan claro como pude.

- No, no soy Harry. - Dijo una voz que se me hacía familiar. Las pocas esperanzas que tenía ya habían desaparecido... Si no era Harry...¿Por qué estaba usando su celular para llamarme? - Soy Louis.

- Ah, em, hola. - Dije tímidamente, nunca había hablado con él antes y solo lo había visto el día del concierto. Ese día se me hacía muy lejano, como si hubiera sido hace muchos, muchos meses.

- Sé que es raro que te esté llamando yo del celular de Harry... - Empezó a decir.

- Sí, mucho más raro si es un día de semana a las tres de la mañana. - Lo interrumpí.

- Ah, sí, perdón por eso, pero no había otro momento. - Dijo y luego tomó aire, tan alto como para que yo escuche desde el otro lado del teléfono. - Hay algo que tenés que saber. 

- ¿Y que es? - Pregunté, pero después me dí cuenta que podría haber dicho algo mejor. - Si me vas a decir que Harry ya no quiere verme tendría que estar llamándome él...

- ¿Qué? No, no, no. - Dijo él interrumpiendo lo que le estaba por decir. - Estoy haciendole un favor a él.

- ¿De qué estás hablando?

- Si él no te está viendo últimamente, ni te llama, ni te manda ningún mensaje no es poque no quiere. - Mis manos empezaron  a temblar, cerré mis dedos alrededor del acolchado para impedirlo. - Es porque no lo dejan. 

- ¿No le dejan hablar conmigo? - Pregunté con un susurro.

- Exactamente. - Él también estaba susurrando, como si no quisiera que lo escuche nadie que pudiera pasar cerca de él. - Y necesitaba decirtelo porque me doy cuenta que él no esta bien.

Suspiré, pero fue un suspiro más de sorpresa que de otra cosa.

- Me estás diciendo... - Hice una pausa. - Em... ¿Él no quería dejarme de hablar?

- No, él no quería. Los manangers se lo prohibieron pero no se dan cuenta que estar con vos le hace bien. Y eso se le nota ahora. 

Suspiré, no sabía qué decir. Los pensamientos me daban vueltas y vueltas en la cabeza. Estuve las últimas dos semanas pensando que Harry me había estado ignorando, que ya no le importaba y ahora me vienen a decir que no era así, que no tenía razón. 

En ese momento me arrepentí de todo lo que había dicho en el contestador del teléfono, no porque no lo sintiera si no porque se lo dije de mala manera cuando él no lo merecía. 

- Louis... - Dije volviendo a la realidad. - ¿Él escucho el mensaje que le dejé?

Sentí que él decía algo por lo bajo que no llegué a entender, y volvió a hablar pocos segundos después, pero mucho más rápido que antes.

- No tengo tiempo, perdón. - Dijo y con un poco de esfuerzo pude saber qué trataba de decir. - Mañana andá a la casa de Harry al mediodía, él va a estar ahí y yo también, cuando llegues los voy a dejar solos para que puedan hablar. 

- B-bueno, ahí voy a estar. - Estaba tan nerviosa que las palabras apenas salían de mi boca. 

- Me tengo que ir, nos vemos mañana.

- ¡Louis! - Dije antes de que pudiera colgar.

- ¿Sí?

- Gracias, muchas gracias, en serio.

- No hay de qué. - Dijo y pude notar que lo decía con satisfacción, contento por lo que había hecho. - Ah, y tratá de ser discreta, él no sabe que vas a ir.

Lost in your eyes. (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora