Lost in your eyes. (Español)

Capítulo Setenta y Uno - Cita doble.

Sus ojos se abrieron de repente, su boca formó una "o" y trató de pronunciar algunas palabras pero no pudo, simplemente no le salían. 
- ¿Harry? - Le pregunté al darme cuenta de su reacción, tal vez la sorpresa no le había gustado demasiado. 
- ¿Tu papá vive ahí? ¿Justo en frente de acá? - Preguntó con un hilo de voz. 
Asentí con la cabeza y me dediqué a apartar esos mechones enrulados que se habían desparramado por su frente.
- Esto es raro. - Susurró finalmente, buscando mis ojos. 
- Sí, lo sé. - Contesté. - Mi padre no sabe que vivís acá, pensé que sería mejor decirle cuando todo esté calmado. 
- Tenés razón. - Me dijo y se acercó para darme un beso en la mejilla. - Tengo una idea. 
- ¿Qué idea? - Pregunté emocionada, al ver su mirada pícara. 
- Cita doble. - Susurró en mi oído. 
- ¿Cuándo?
- Ahora.
- ¿Con quiénes yo estoy pensando?
- Exacto.  
Media hora más tarde, después de prepararnos un poco para salir y llamarlos por teléfono, Niall, Lucy , Harry y yo estábamos encontrándonos en el cine, recibiéndonos mutuamente con un abrazo. 
Decidimos ver la única película que no estaba agotada, ya que el lugar estaba abarrotado de gente. Por alguna extraña razón, o tal vez solo por buena suerte, nadie nos reconoció, porque eran tantas las personas que no se llegaban a fijar en que los mismísimos Harry Styles y Niall Horan estaban en el mismo lugar que ellos.
Noté a Harry preocupado mientras esperábamos a entrar en la sala, hablando y riéndonos con Niall y Lu. Tomé su mano fuertemente. 
- Estoy bien. - Le murmuré casi solamente moviendo mis labios. La cantidad de gente y el poco espacio para moverse era lo que lo preocupaba, pero lo tenía  a mi lado, y eso me hizo no dudar ni un momento, no me iba a pasar nada. 
Una vez que entramos a la sala, lo que menos hicimos fue ver la película, estuvimos esa hora y media riéndonos a carcajadas que tratamos que sean silenciosas, pero más de una vez los espectadores nos pidieron silencio. 
Fuimos a comer juntos, disfrutando cada momento, cada palabra, cada risa. Niall y Lucy se veían muy cómodos juntos, muy felices. Abracé a mi mejor amiga una infinidad de veces, feliz por verla de ese modo. 
Estuvimos juntos más de tres horas, esperando que nuestra cita doble nunca termine, pero en el momento en el que salimos a la calle, pasó lo que nos habíamos olvidado por un rato de que podría pasar.
Paparazzis. 
- Oh no. - Susurré cuando ví decenas de camionetas negras y hombres con cámaras bajando rápidamente de ellas. - No de nuevo. 
Mi preocupación ya no estaba en nosotros, porque todos ya nos habían descubierto, eran Niall y Lucy a quienes ellos venían a buscar.