Capítulo Cincuenta y Nueve - Sorpresa.

2.3K 88 3
                                    

- Me voy a morir. 

- ¡NO! - Le grité a Lucy al oír lo que había dicho. Estábamos a punto de entrar en la parte del estudio en la que estaban los chicos. Ya habíamos atravesado la entrada y subido un ascensor, y todo el camino tuve a Lucy repitiendo esa misma frase. 

- Sí, ahora, definitivamente voy a morir. - Y antes de que pudiera contestarle nada, Harry apareció girando por el pasillo en el que estábamos. Sus ojos se abrieron de repente al vernos, y dando grandes pasos, llegó hasta nosotras. 

- Hola Lucy, es un placer conocerte. - Le dijo antes de darle un abrazo a mi amiga, quien prácticamente se petrificó, con los ojos demasiado abiertos y la mandíbula caída. 

Harry sonrió al ver su reacción y después sus brazos me envolvieron, transmitiéndome todo eso que la noche anterior me había dicho por teléfono.

- ¿Cómo estás? - Me susurró al oído.

- Bien, ahora mucho mejor. - Una gran sonrisa apareció en su rostro, me besó la frente y después tomó mi mano, invitándonos a Lucy y a mí a seguir caminando por el pasillo. 

Con mi brazo libre rodeé los hombros de mi amiga, que estaba completamente en shock. Le había contado todo lo que había pasado la noche anterior y justo por eso se negó a venir en un primer momento, pero cuando le dije que esto sería algo muy bueno para las dos y que me haría bien cambiar el ambiente en el que estaba, terminó aceptando. 

- ¿Lista? - Le susurré antes de cruzar por la puerta. Con una gran sonrisa, asintió con la cabeza y entramos los tres a la vez a la gran habitación. 

- ¡Tengo a alguien a quien presentarles! - Anunció Harry ni bien estábamos dentro. Los cuatro integrantes que faltaban aparecieron de todos lados, cada uno con una expresión diferente. 

Los ojos de Lucy centellearon al verlos, y una felicidad increíble se plasmó en su rostro cuando los cuatro se acercaron a ella para saludarla. La abrazaron y después me saludaron a mí. 

- Gracias. - Me susurró cuando ya había abrazado a todos. 

- Ni lo digas. - Le contesté. 

Después de eso, nos sentamos todos en los grandes sillones que había en torno a una mesita ratona y gracias a ellos seis pude olvidarme, aunque sea por un rato, de todo lo que estaba pasando en mi casa. Todo, absolutamente todo, se esfumó cuando las conversaciones extrañas y las carcajadas grupales retumbaron contra las paredes. 

Lucy se sintió muy cómoda hablando con ellos, tanto como yo, que estaba todo el tiempo tomada de la mano de Harry. 

Pude ver, después de un rato, que la mirada de Niall nunca se alejaba de mi amiga, de no ser, claro, que ella lo mirara. Un pequeño presentimiento surgió dentro mío y me acordé de esa vez en la que ella me había dicho: "Los chicos no se fijan en mí." 

"Sí, claro." Pensé para mis adentros mientras veía los ojos de Niall seguir todos los movimientos que hacía. 

- Creo que a alguien le gusta Lucy. - Me susurró Harry al oído, como si hubiera leído mis pensamientos. 

- No me digas... - Le contesté sonriendo, en el mismo tono. - Se me hace que alguien va a conseguir un número esta noche. 

- ¿Apostamos? 

- Pensamos los dos lo mismo, tontito. - Le dije riéndome. 

- Bueno, si Niall o Lucy le pide el número al otro, tenemos que darnos una sorpresa los dos, yo a vos y vos a mí. 

- Bien... Y si no se intercambian los números... ¿qué? 

- No sé, pero ya estoy pensando en la sorpresa. 

Lost in your eyes. (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora