Lost in your eyes. (Español)

Capítulo Veintinueve - Momentos.

Tres años de diferencia.

Nunca me había detenido a pensarlo, es decir, sí estaba conciente de que él tenía diecinueve y yo solo dieciséis pero jamás pensé en eso como un problema, porque desde un primer momento la edad no fue algo que nos diferenciara. Eramos muy parecidos en muchas cosas sin importar cuantos años de diferencia hubiera entre nosotros.

Pero él tenía razón, no se vería bien que uno de los integrantes de la banda más famosa del momento esté saliendo con una chica tres años menor. Y había otras personas que tampoco iban a aprobarlo: mis padres.

Nunca en la vida me dejarían estar con alguien mayor, tal vez si es alguien que solo me lleva un año pero tres... Nunca. Jamás estarían de acuerdo. 

Los brazos de Harry me rodeaban la cintura, estabamos cerca, sus ojos miraban directamente a los míos.

- Harry... No sé... No sé qué hacer. - Dije tratando de buscar una respuesta al problema que teníamos en ese momento. 

- Sshh, después vemos qué pasa con eso. - Dijo apoyando su frente contra la mía. - Te extrañé muchísimo.

Antes de que pudiera decir algo más choqué mis labios con los suyos, poniendo rápidamente mis brazos alrededor de su cuello. Él me besó de la misma manera, abrazándome más fuerte la cintura.

- Yo también te extrañé mucho. - Dije cuando se apartó para respirar.

Sus labios volvieron a tocar los míos, pero esta vez me besó suavemente, acariciándome el pelo con su mano derecha. 

- Lo lamento. - Susurró.

- No es tu culpa. - Susurré y lo abracé.

Pasé mis brazos alrededor de su cintura y me dejé envolver por los suyos, que me apretaban fuertemente contra su pecho. Me dio un beso en la frente y luego me condujo hasta el sillón, donde los dos nos recostamos abrazados a hablar, como lo habíamos hecho siempre. 

Lo había extrañado mucho, extrañaba sus besos, sus abrazos, la forma en que me miraba con media sonrisa cada vez que hacía una broma, la forma en que su perfume quedaba impregnado en mi ropa, la extraña sensación que me recorría la espalda cada vez que se acercaba a mí.

- ¿Qué vamos a hacer? - Le pregunté, mi rostro enterrado en su cuello.

- No lo sé... - Susurró con un suspiro. - No lo sé... Pero no quiero que te vayas. 

- No me voy a ir. - Dije con confianza.

- Tenemos que encontrar alguna forma, no pueden prohibirme que te vea.

Me hubiera gustado dar una respuesta. Me hubiera gustado decir "Quedate tranquilo, nada nos va a separar." pero eso no sería completamente verdad, ya nos habían separado una vez y este momento era algo que tal vez no se podía repetir. 

- Ya nos escondimos de mis padres... Podríamos escondernos de ellos. - Dije, fue lo único que se me ocurrió en ese momento.

- Pero... No es tan fácil, se enteran de todo. - Dijo mirándome por encima de su hombro. -  Se enteraron de que estábamos juntos sin que yo le contara a nadie. Le conté a los chicos, pero ellos prometieron no decir nada. 

Suspiré frustrada, no se me ocurría nada, ninguna respuesta, ninguna forma de superar esto. Solo deseaba que ese momento nunca acabara, quería quedarme atrapada entre sus brazos todo el tiempo posible, no me importaba nada más. Quería estar con él, eso era lo que verdaderamente sabía.