ᴀɢᴇɴᴛᴇ ꜱᴇᴄʀᴇᴛᴏ x ᴛɴ 1

25:00

Giré lentamente mi cabeza y luego miré a Heeseung.

— Un cumpleaños... Por el regalo de Kiminari.

— No le gustan los cumpleaños. — corrigió Sunghoon dando pasos lentos.

Cómo hacia Sunghoon para intimidar con su presencia...

— ¿No hablarán? — preguntó Sunghoon mirando a ambos.

— Estoy hablándote Heeseung. — contestó Sunghoon.

Miré a Heeseung y pude sentir su situación incómoda.

Después de todo, era algo en donde se confirmaba sobre la llegada de su padre que asesinó a toda su familia...

Necesitaba ayudarlo en algo... No quería que las cosas entre ellos se arruinaran más de lo que ya estaba.

— Estamos saliendo.

— que estupidez.

— Sonará estúpido pero... — caminé hacia Heeseung. —   nos gustamos y Heeseung me invitó a ser su pareja.

Sunghoon volvió a reír y al notar ninguna gracia en nuestros, dejó de sonreír.

— ¿Están saliendo? — preguntó Sunghoon.

— Si, lo estamos. — contestó Heeseung apoyando su mano en la cadera de Tn.

Sunghoon sonrió alzando sus cejas y echó una corta risa.

— Ya veo. Fuiste rápido. — comentó Sunghoon.

Si, me sentía mal tercio entre ellos.

Porque Sunghoon se reía con una falsedad más clara que el agua y Heeseung parecía tomarselo con la suficiente seriedad como si fuera real.

— Vivan los novios. — contestó Sunghoon sonriendo con ironía. — que puedo decir.

— Nada, no puedes decir nada. — advirtió Heeseung — Porque de ahora en adelante, pondré los límites contigo. Tn es mi pareja, no quiero que te involucres en nuestra relación.

— ¿Cómo podría meterme en su relación? — preguntó Sunghoon frunciendo el seño. — No podría.

' no podría '

.                      .                     .

Esa misma tarde, Sunghoon no dudó en comentar a Kiminari y a Austin sobre la falsa relación de Heeseung conmigo.

Se la pasaron toda la tarde hablando sobre la inesperada relación pero que aún así lo respetaban.

Las horas pasaban rápidamente.

En la cena, habían cocinado filete con puré de verduras, debía admitir que su aspecto se veía increíblemente delicioso pero no tenía apetito.
De hecho, aprovechaba esos momentos libres para tomar las dagas que Heeseung me había prestado y practicaba en mi habitación.

Porque si, ahora sí podía tener mi propia habitación.

De todas maneras, la madrugada llegó y aún me mantuve metida en mi habitación.

Me di una ducha relajante y luego me senté en el sofá a leer, me coloque los auriculares con música fuerte y dejé que mi mente se relajara con la literatura.

Sin embargo, después de unos minutos, dos manos taparon mis ojos haciéndome estremecer del susto por lo que me saqué los auriculares con prisa y me giré oyendo la risa de Sunghoon.

— ¿Que haces aqui? — pregunté.

— ¿No puedo visitar a mi amiga? — preguntó Sunghoon con gracia.

— No somos amigos.

— ¿Que lees? — preguntó Sunghoon sentandose al lado de Tn en el sofá.

— Dame eso. — Susurré arrebatando el libro de sus manos. — Deberías ir a dormir. Son las 3 de la madrugada.

— con más razón, me gusta aprovechar las noches. — contestó Sunghoon.

Miré a Sunghoon quién lamía sus labios sintiendo una instantánea atracción hacia el para dejar de verlo.

— ¿Esperas que me crea el cuentito de que salen? — preguntó Sunghoon acariciando la pierna de Tn.

Mi cuerpo se estremeció un poco ante sus suaves caricias.

— ¿Porque te importa tanto Heeseung? — preguntó Sunghoon.

— Porque es mi p-

— ¿Tu amigo? Ya no es necesario que mientas...

Miré a Sunghoon y saqué su mano de mi pierna.

— ¿Nunca haz pensado que en realidad lo consideras como un amigo a Heeseung? — preguntó Sunghoon — Piénsalo, después de todo, el lo toma como un punto a su favor ya que todos creemos en que son pareja...
Supongo que en algún momento tendrá la oportunidad de besarte...

Sunghoon me sentó en cuestión de segundos en su regazo y apretó lentamente mis piernas sintiendo excitación.

— Pero es una pena que yo pueda besar cada parte de tu cuerpo sin su permiso...

Sunghoon metió su mano en mi remera y acarició mi espalda dando un escalofrío en mi cuerpo.

— Puedo tapar tu boca si gritas demasiado. — contestó Sunghoon acostando a Tn.

— Sunghoon... N-

— Es nuestro secreto, confía en mí.

Su dedo acarició la tela de mi braga y ni siquiera fui consciente de cuando me había quedado semidesnuda.

Su otra mano libre bajó mi braga y acercó su boca a mi intimidad.

.                   .                  .

Abrí mis ojos mientras me sentaba del impulso y pasé mi mano por mi cabello el cual estaba sudado.

Todo mi cuerpo estaba sudado, tenía ropa y no había nadie en la habitación.

— no puedo creerlo... — Susurré con agitación.

tuve un maldito sueño húmedo con Sunghoon.