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Esa misma noche, fui a trabajar.

No quería volver a ser mantenida por ellos y no pareció notarse mi ausencia ante ellos.
Tampoco parecía como si les preocupara de que me hicieran algo y lo mejor que podía hacer en estos momentos era trabajar.

— Sirve a la mesa 4. — respondió el jefe.

Acepté y agarré la bandeja con los vasos, subí al primer piso con cierta dificultad para llegar a la mesa.

En el momento que agaché mi cuerpo un poco, los vasos se deslizaron y cayeron en las prendas de los clientes.

— ¡agh! — gritó la mujer.

— ¡Discúlpenme! — alze la voz preocupada.

— No puedo creerlo. — contestó la mujer con desagrado.

Dejé la bandeja en otra mesa y tomé servilletas para ofrecerle a la mujer...

— ¿¡Podrías hacer tu maldito trabajo bien!? Está chaqueta vale más que tú ridículo sueldo.

Intenté hablar pero permaneci callada.

— ¿Que sucedió? — preguntó el jefe.

— Pregúntale a tu estúpida empleada. Tendrás que pagar mi camisa, ¿Lo sabías? — contestó la mujer tirando la servilleta al suelo.

.                  .                 .

Esa misma noche me despidieron.

Ni siquiera me pagaron el sueldo completo, es más, mi jefe había dicho que no merecía ni el monto más pequeño ya que aún debía pagar la prenda manchada de aquélla mujer.

Mientras caminaba por las oscuras calles que dirigían a mi departamento me puse a tararear una canción que hace tiempo no oía.

Una canción de mamá...

Llegué a las escaleras y empecé a subirlas mientras movía las llaves al ritmo de la canción.

— Linda canción. — contestó.

Me giré sobresaltada hasta sentir un alivio al saber que se trataba de Luke.

— Tú... — Susurré.

— ¿Te asusté? — preguntó con gracia. — disculpa.

— ¿Que haces aquí? — pregunté.

— Creo que fui muy directo en decirte que no puedes caminar como si nada.

— No lo entiendo, tu mataste a esos hombres. ¿Que tengo que v-

— Pero seguramente ellos revisaron las cámaras. Podrían herirte. — contestó Luke cruzandose de brazos.

Abrí la puerta y solté otra risa con ironía.

— No me importa morir, no tengo nada que perder.

Una triste y frustrante realidad.

Pasos se oyeron de el primer piso lo cual era normal.

Bueno, uno podría pensar que es normal pero dejó de serlo al oírse varios ruidos de armas y pesados pasos.

Luke me empujó adentro del departamento y cerró la puerta con cuidado para empezar a trabar el paso con algo pesado.

— ¿Quienes son ellos? — pregunté retrocediendo.

— Los mismos hombres.

— ¿Más? — pregunté.

Luke no contestó he inmediatamente tomó mi mano llevándome a una de las habitaciones.

— Quédate aquí. La altura del suelo con el piso del edificio no es favorable si bajas sola...

— ¿Tu sólo saldrás? — pregunté con miedo. — Son varios.

Justo en el momento que Luke iba a hablar, golpearon la puerta con tal fuerza que terminaron haciéndola pedazos.

Luke tapó mi boca y me acorraló contra la pared mientras sus ojos estaban fijados en mi.

— Shh... — Susurró.

Esto... Esto me recordaba a Sunghoon...
El hizo exactamente lo mismo...

Aquellos hombres comenzaron a hablar en italiano mientras se distribuían en diferentes sectores del pequeño departamento.

Luke abandonó la habitación y salió al pasillo.

Mientras tanto, no podía arriesgarme a intentar escapar, ni siquiera podía correr el peligro de hacer un solo paso...

Me quedé bien en la esquina de la habitación oyendo gritos de uno de los hombres y luego pasos que próximamente serían acompañados de fuertes balazos.

Tapé mis oídos asustada para pegar un pequeño grito al ver cómo un hombre corría apuntandome al rostro hasta que su cabeza explotó por completo.

Su sangre cayó completamente en mi rostro y lo único que pude ver antes de ver su cuerpo inerte desplazarse en el suelo fue su expresión de desesperación y preocupación.

Abrí mis ojos nuevamente para sacar el exceso de sangre con dificultad por el temblor de mis manos hasta bajar la mirada a las manos de aquél hombre.

En una sostenía el arma y en la otra había una pequeña foto.

— eso estuvo cerca... ¿Estás bien? — preguntó Luke limpiando su frente cubierta de sangre con la manga de su camisa.

Tomé la foto con lentitud y la observé con mucha atención...

El hombre tenía una familia...

En la fotografía se mostraban a tres niños pequeños junto con la madre...

— tenía familia... — Susurré apenada.

— Debió haber pensado las cosas antes de trabajar para esto. — contestó Luke ayudando a Tn a levantarse.

Me safe inconscientemente de su agarre y Luke frunció su seño con molestia.

— Todos tenemos o tuvimos una familia. — contestó Luke.

— Pero-

— Nosotros directamente no tenemos familia. — contestó Luke — Y tampoco tendremos la oportunidad, ¿Lo entiendes?

— Si tuviste... — Susurré.

— Si, pero la perdí hace tiempo y a diferencia de otros. Nosotros directamente no tenemos la oportunidad de una familia porque corremos el peligro de que los asesinen.

La OPSM no tenía la oportunidad de formar una familia o al menos una relación por el hecho de que corrían peligro aquellas personas a las que más amaba.

Cuánta razón en pocas palabras.









Holaaa.

Probablemente haga una segunda parte sobre este fanfic. Sinceramente, ya tengo una idea de cómo finalizará está primera parte :D.

Dame tu opinión si no es molestia :)

ᴀɢᴇɴᴛᴇ ꜱᴇᴄʀᴇᴛᴏ x ᴛɴ 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora