Mi Vida Entre Tus Manos. (PJM & MYG).

CAPITULO 8. ¿Estas teniendo un buen día?.

                              Olivia.

Llegué a la empresa muy temprano como de costumbre, con mi café en mano. Iba a subir al ascensor.

-Mexicana.- Jimin se paró justo a lado de mi. También tomaría el ascensor -Ya no saludas, que descortés.- Negó con la cabeza frunciendo leve el ceño y comprimiendo sus labios en forma de desaprobación.

-Hola.- Respondí sin prestarle mucha atención. Rio con sorna.

A la par de Jimin llegó Yoongi, al verme sus labios se curvaron en una amable sonrisa. Sentí que las piernas me temblaron.

-Buenos días.- Hizo una leve reverencia.

-Hola, buenos días.- Reverencie devolviendo el gesto con una sonrisa en mi rostro. Tratando de aparentar que no estaba nerviosa después de lo que había pasado ayer en su estudio.

Los tres entramos al ascensor y Jimin marco los pisos a los que íbamos.

Ninguno dijo nada, las puertas del ascensor se abrieron en mi piso, estaba por bajar cuando la voz de Jimin me hizo detenerme.

-Buen día señorita Oropeza.- Esa mirada juguetona y esa sonrisa descarada de siempre aparecieron en su rostro. Me limite a hacer una pequeña reverencia y seguí mi camino.

Ese chico sin duda no se cansaba de jugar, a decir verdad, podría mirar que le fascinaba molestarme.

No mentiré, no he dejado de pensar en lo que pasó ese día en el estacionamiento de la empresa. Por su comportamiento ese día estoy segura que sólo busca con quien pasar un buen rato, porque para ser sinceros un hombre como él, no me tomaría enserio siendo sólo una empleada.

Entre a la sala de edición, había una parte de los compañeros de staff, pero Sonmin aún no llegaba. Acomode mis cosas para comenzar con mi trabajo, mientras mi amiga llegaba.

-Buenos días.- Sonmin tomo su lugar junto a mi acomodando sus cosas. Note su voz un tanto extraña, le faltaba emoción a su voz.

-Buenos días.- Le respondí. Me dedico una sonrisa, pero noté que estaba forzándola. Algo le ocurría -¿Estas bien?.- Le pregunté, tal vez necesitaba hablar con alguien.

-Si, si estoy bien, no te preocupes es sólo que tengo sueño aún, pero estoy bien, llegando a casa dormiré.- Amplio más la sonrisa.

-Bueno, comencemos.- Dije señalando las computadoras.

                          [……….]

Sonmin había estado muy callada, no era normal en ella eso era seguro.

-¿Qué quieres comer hoy?.- Pregunte para romper el silencio.

-No lose, realmente no tengo hambre.- Se encogió de hombros.

-Elige lo que tu quieras, hoy te invito yo.- Quería levantarle el ánimo, para que se le olvidará un rato, lo que sea que le haya pasado.

-Solo comamos en la cafetería de aquí y ya…un par de sándwiches.- Sugirió.

-Esta bien.

Una vez llegada la hora de comida, nos fuimos directo a la cafetería. Pedimos los sándwiches y unas malteadas.

-¡¿Sabes quién me pregunto por ti?!.- Sonreí con emoción.

-¿Quién?.- Me miro.

-Jungkook!.- Susurre.

-No te creo.- Negó varias veces.

-Enserio que si.

-Hola chicas.- Jindae se sentó con nosotras.