💧;051

82 17 1
                                    

— Tengo el presentimiento que he escuchado ese nombre en algún lado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


— Tengo el presentimiento que he escuchado ese nombre en algún lado. — Hyung Jun murmuraba dentro de esas cuatro paredes de su habitación, tratando de recordar en donde había escuchado el nombre de ese hombre que le mencionó Choi Siwon hace poco.

«Heo JoonGi» El nombre masculino y atrayente del que según decían que era el de su padre biológico, resonaba una y otra vez en su cabeza con una fuerza aplastante que le quitaba el aliento y le provocaba terribles jaquecas. Y aún así, no lograba recordar en donde había escuchado ese nombre.

Dando un profundo suspiro a la nada, se volvió a acomodar en la cama en dónde había hecho un nido para sentirse cómodo y protegido mientras pasaba sin ningún inconveniente su época de calor, tomó una manta y se abrigó con ella para seguir durmiendo. Como su celo había regresado después de varios años, regresó con hiperbólico deseo sexual para atraer a su destinado.

Grandes cantidades de fluidos estaba siendo expulsado de su trasero, preparándose anticipadamente para ser penetrado. Su conejito no dejaba de brincar de aquí para allá con inquietud, tratando de llamar la atención de cierto león que le robaba varios suspiros.

Un gemido involuntario brotó de sus finos y rosados labios, cuando una nueva ola de calor tocó placenteramente cada fibra de su cuerpo haciéndole estremecer y expulsar más de su propio lubricante natural. Llevando una mano hacia su propia entrepierna roja y endurecida, la envolvió acariciando la punta donde se asomaba un líquido semiblanquecino.

— Jung Min~ — Sin ser consciente que estaba siendo dominado por su omega, gimió sin decoro el nombre de ese alfa que deseaba tener entre sus piernas, follandolo. Anhelaba a Jung Min en estos momentos.

Varios segundos después, sus labios se llenaron de escandalosos gemidos y sollozos que eran difíciles de acallar, llevó una de sus manos a uno de sus endurecidos pezones empezando a acariciarlo y tirar de él mientras la otra seguía envuelta en su erecto miembro dándose placer, su mano subía y bajaba de forma tortuosa por toda su longitud, apretándolo por ratos para volver a acariciarlo suavemente, comenzando a sentir una especie de hormigueo en su abdomen bajo avisando que estaba por tocar la mas alta cúspide del orgasmo.

Su nívea piel brillaba en un tono perlado por el sudor que lo arrullaban seductoramente, sus mejillas estaban embalsamadas de tinte rojo y su vista acuosa a causa de las lágrimas, le daban un contraste lujurioso y caliente a su delicada apariencia.

Y para una mayor comodidad, el omega se acostó en la cama boca arriba con las piernas totalmente separadas, dejando su intimidad expuesta a la intemperie; su ano hinchado, húmedo, rojo y punzando, ansiando ser llenado por el miembro de su predestinado y un miembro erecto que se mostraba con interés para ser acariciado otra vez.

Ubicando nuevamente su mano en su entrepierna, la movió con más agilidad y rapidez sobre su eje, soltando gemidos y chillidos sin parar con el nombre de 'Jung Min' mientras tiraba ferozmente de su pezon, y con un fuerte grito arrasador pero excitante logró su tan ansiado orgasmo, su esencia seminal salió disparado por todo lado logrando manchar su mano y estómago. Mientras su lubricante natural volvía a mojar sus piernas y trasero, al igual que a las sábanas.

¡MARCAS DEL DESTINO! [Omegaverse] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora