❄️San ju🔥.2

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Los siguientes días, fueron tranquilos. Shoto iba a trabajar, los niños iban al prescolar por los preparativos del festival (en compañía de Rei-san), mientras que Fuyumi-san me hacía compañía. Para variar un poco, Mina vino en acompañada de Ochako y Momo. Ellas parecieron emocionadas de verme con el enorme barrigón, pero por mi parte solo me quejaba que no podía hacer lo que quisiera (por ejemplo, ir a ayudar a mis hijos con el festival o ir a trabajar). Las hormonas me atacaban cada segundo de mi existencia y los antojos dejaban al resto sin sobras para preparar la cena.
Aparentemente, a las chicas se les ocurrió la mejor forma para combatir mis cambios de humor, Mina trajo la televisión del cuarto de Shoto y conectó la consola de videojuegos. Ellas realmente me conocían, jugamos algunas rondas en donde competimos entre nosotras por equipos. Habremos estado así por varios minutos y nos divertimos como no lo habíamos hecho en un tiempo. Luego de un buen rato, las invité a tomar un té en el patio, pero parecían empecinadas en evitar que saliera de la habitación.

—¿Y a ustedes qué mosca les picó? —les pregunté, cuando conseguí levantarme (a duras penas) de la cama.
—Nada, es que deja que preparemos el té por ti —yo solo les dediqué una mirada molesta, no podía obligar a que mis invitadas hicieran las tareas domésticas—. Además, a Momo se le da muy bien preparar el té —Ochako-chan miró a la pelinegra, quien se acercó a paso tranquilo—. ¿A qué no Yaomomo?
—Así es, tú solo recuéstate y relájate __________-san —Momo me obligó a sentarme de nuevo en el sillón de la habitación—. Iré a prepararlo y te avisaré cuando esté listo.
—Saben que me refiero a esto —intenté levantarme, pero Mina se adelantó y me volvió a sentar a la fuerza—, chicas, estoy embarazada, no enferma.

Si recordaba de mis momentos como estudiante, calculaba que mi vientre podría ser de una embarazada de 25 semanas. El bebé apenas se movía en las mañanas, siempre me molestaba por las noches cuando me iba a dormir. Las nauseas habían vuelto hacer acto de aparición esta noche, aún que no eran en sí náuseas, era más un reflujo. Shoto consiguió pedirse unos días para la fecha que estimábamos que sería el que daría a luz.
  Hasta un día, cuando Rei-san se fue a pasear con Natsuo, Endeavor había venido a verme y hablar conmigo. En cuanto notó mi vientre hinchado, la cara seria y sepulcral que llevaba al momento de ingresar a la casa, se calmó y reflejó un rostro serio y simple. Lo primero que hizo, en cuanto le servimos una taza de té, fue arrodillarse ante mi, pidiendo disculpas por la actitud que había tenido conmigo hasta el día de hoy. Yo no resentía a Endeavor por los malentendidos que tuve con su hijo en el pasado, sin embargo, no podía hablar de igual manera sobre la actitud de Shoto.
  Casi lo echa a patadas, furioso al enterarse que Endeavor había maquinado todo desde el principio para que nuestra relación se fundiera. Por su culpa, él no pudo estar conmigo o conocer/interactuar con los gemelos antes de que nacieran (esas fueron las palabras de mi prometido). Se veía en los ojos de su padre, que había reflexionado sobre sus antiguos actos y quería recomponerse como persona. Ese día, Shoto no pudo soportar estar en la misma habitación que su padre y lo echó a patadas. Yo salí a los pocos minutos, le encargué al bicolor que fuera a buscar a los niños, y aproveché el pequeño momento para dejarle en claro a mi suegro que le diera tiempo.

  Volviendo a la actualidad, resoplando por la impotencia de no poder hacer mucho con respecto a salir de la habitación, miré por la ventana que daba a la entrada de la casa. Podía ver muchos autos estacionados delante de la casa, por supuesto, sabía que no eran todos de las chicas, ya que había alrededor de 8 autos, sin incluir el de Shoto y el de Momo. Algo pasaba en la casa y no querían que supiera.
  Para cuando Momo nos avisó de que el té ya estaba listo, por fin pude salir de esas cuatro paredes a la cual ya me aburría ver, y caminamos hacia el jardín. De la nada, sentí algunas serpentinas y confeti sobre mi cabeza.

   —¡Felicidades por el bebé! —yo solo estaba allí parada, frente a todos los compañeros de Shoto y bajo una pancarta "Revelación del sexo del bebé candente". Shoto se acercó a mí y besó mi mejilla.
   —¿Cuándo organizaron todo esto? —pregunté sorprendida, recibiendo el abrazo de algunas de la chicas.
   —El día que vino el médico a hacerte la ecografía —anunció Kirishima—, lamentablemente, no pudimos ocultarlo de Todoroki ya que regresó antes de lo que pensábamos.
   —Ni yo sé que será, Kirishima y el resto se encargaron de montar la fiesta —las lágrimas se me acumularon en los ojos, realmente me hacía feliz tener este grupo de amistades.
   —Chicos, de verdad les agradezco... Es hermoso.

¿Estás dispuesto a darlo todo cómo padre? (Todoroki Shoto x TN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora