¿Estás dispuesto a darlo todo cómo padre? (Todoroki Shoto x TN)

❄️San ju kyu🔥

Tal como me lo había pedido Shoto, me quedé en el cuarto unos minutos, antes de reunirme con el resto de la familia en el comedor. No solo porque mi esposo lo haya dicho, sino que también por el susto de ver a mi hija temblando sin parar. Realmente me asusto verla así. Me quedé observándola por varios minutos, hasta que Kazuya vino a buscarme, preocupado de que no apareciera.

—¿Te sientes bien, mamá? —preguntó con cierta preocupación—. Papá dice que vengas a la sala.
—Iré en un segundo, tranquilo mi amor, estoy bien —camino hasta mí y me abrazo con todas sus fuerzas—. ¿Qué tal Hawks? ¿Se ha comportado bien con ustedes?
—Sí, aunque dice cosas extrañas, entonces papá dijo que si seguía diciendo idioteces, lo rostizaría como a un pavo en Día de Acción de Gracias.
   —Maldita sea, no puedo darme la vuelta que tu padre se mete en cada discusión posible... —volví a depositar a Ángela en la cuna y caminé acompañada de Kazu hasta la sala. Parecía estar todo en orden, de hecho, todo estaba demasiado tranquilo—. Lamento lo de hace un momento, la bebé necesitaba que alguien la volviera a dormir. Soy *___________*, es un gusto conocerlo Hawks-san.
   —Ni lo menciones, Endeavor dijo que su nuera era hermosa, pero creo que su descripción no te hace justicia...
   —Hawks...
   —En fin, me presento. Soy Takami Keigo, pero llámame como prefieras —hizo una especie de reverencia elegante—. Lamento molestarlos de esta manera, pero vengo de parte de Endeavor para discutir algunas cosas relacionadas a trabajo...
   —Ya le dejé en claro a mi viejo que no regresaría a la agencia esta vez, fue mi última palabra —se adelantó Shoto, tomando unos papeles que estaban sobre una mesa cercana—. Aquí están los papeles formales de mi renuncia y la información de transferencia por mis años de servicio en la agencia.
   —La cosa es, pequeño Shoto, que conoces cómo tu viejo mueve los hilos —oh demonios, Fuyumi y yo nos intercambiamos unas miradas nerviosas y arrastramos a los niños a otra habitación, antes de que presenciaran una verdadera masacre.
   —¡Pero mamá! ¡Queremos saber de qué están hablando! —Yuki protestaba, al mismo tiempo que ponían resistencia.
   —No, no quieren saberlo.

  Con suerte, los trasladamos a la habitación de usos múltiples. Allí a veces, Kazu y Yuki entrenaban sus dones, también la usamos para una reunión con los miembros de la agencia Fat Gum con un banquete hace unos meses atrás o, cuando Rei-san tenía sus fiestas de té especiales con sus amigas los organizaban en ese espacio. Fuyumi se quedó a hacerme compañía al supervisar el entrenamiento forzoso de los gemelos en lo que mi esposo debe estar en una discusión más que subida de intensidad. No sabría decir por cuanto tiempo estuvimos allí, solo sé que claramente por esta situación, aplazamos la hora de la cena.
  Rei-san tuvo que buscar calmar el ambiente un poco, antes de que Shoto siquiera se atreviera a cocinar a su superior. La comida estuvo más que tensa, los niños apenas hablaban de cualquier cosa, que Hawks buscaba hacerles una pregunta y, por supuesto, Shoto lo interrumpía por debajo de la mesa dándole una patada en la pierna. Esa noche nos fuimos a dormir muy tarde, mi esposo no paraba de protestar por la actitud prepotente de su padre y que Hawks parecía más un fanático que trabajaba en el mismo servicio que su ídolo, más que un trabajador en las mismas condiciones que él o su padre/jefe.
  Yo solo oía a mi esposo, moverse de un lado a otro, manifestando accidentalmente sus dones. Por mi parte, me quedé concentrada en Ángela, quién dormía plácidamente en la cuna. Todavía sentía cierto temor de volver a pasar por lo anterior. Entonces, se me vino a la mente la salida pendiente con Tsukishiro. Le envié un mensaje (probablemente para él ya sea demasiado tarde para mensajes) para coordinar un encuentro con los niños pronto.

Si alguien consiguió dormir aquella noche, fue únicamente Ángela y los gemelos, porque el resto de nosotros solo pensábamos en la tensión de la cena y en las circunstancias en la que nos encontrábamos actualmente. A la mañana siguiente, Shoto volvió a la agencia para buscar una solución al problema de su padre, yo me reuní con Mina-chan y Yoichi, mientras los niños se quedaban bajo el cuidado de Natsuo-san (principalmente, para no sobre-cargar a Rei-san y darle un descanso). También, presumo yo, que no dejaría que Fuyumi llegase a llevarle nuestros hijos a la casa de mi suegro a escondidas de Shoto.