𝓘𝓷𝓶𝓪𝓻𝓬𝓮𝓼𝓲𝓫𝓵𝓮

Capitulo 51

- ¿Puedes pasarme la caja de cigarrillos?.

Yo mire a Dietrich con cara de desaprobación, no me gusta que fumara pero menos cuando manejaba.

- Sabes que no me gusta que fumes- dije mirándolo concentrada en la carretera-

- Lo se pero dejar de fumar no se quita de la noche a la mañana - respondió echándome un vistazo- Pasamela anda.

Yo deje salir de mis labios un rechisto en forma de desaprobación para apoyar uno de mis brazos en la ventana para echar un vistazo por ella.

- Cuando hagamos una parada te lo fumas ahora estas conduciendo-

- Dios Liv - se quejo podia imaginar su cara pero no dijo nada al parecer cedió -

Después de un largo rato observando lo que rodeaba la carretera vi las intenciones de Dietrich en hacer una parada a un lado de la larga carretera. Podia imaginar para que hacia la parada.

-¿Pequeña parada?- dije volviendo a retomar conversación después de la ultima -

- Si.

Una vez detuvo por completo el coche Dietrich echo el freno de mano para después desabrochar su cinturón. Se acerco a mi sitio y abrió la guantera para sacar la caja de cigarrillos que anteriormente me había pedido. Vi como salió del coche y por la forma en como lo hizo al parecer estaba algo molesto.

Decidí salir del coche mientras deje salir un suspiro cansado de mis labios.

¿Enserio se había enfadado?.

Cuando salí del coche cerré y camine hasta la parte delantera del coche para rodearla y ver a Dietrich apoyado en la puerta del piloto fumando su cigarro. Su expresión era tensa y me preocupaba porque desde que nos levantamos estaba así. Me acerque a él hasta llegar a uno de sus costados, permanecí varios segundos observándolo como llevaba el cigarro a su boca le daba una cala para después de unos segundos ver como espulsaba el humo por su boca.

Que guapo es ¡Calla consciencia!.

-¿Te ocurre algo? Llevas así desde esta mañana - no dijo nada solamente se delimito a observar al frente, yo deje salir un quejido incrédulo al no recibir respuesta - No entiendo a los hombres.

Dije indignada con intenciones de volver a rodear el coche y volver a mi asiento pero no pude ya que Dietrich con su mano libre agarro mi brazo y me hizo colocarme en frente suya sobre él entre sus pies. Deje salir un suspiro al sentir su brazo rodear mi cintura.

- Perdón- yo levante mi cabeza para mirarlo- Solo ten...

- ¿Qué ocurre Dietrich?- lo mire preocupada y sentí sus ojos observarme - Llevas así toda la mañana y el camino.

¿Qué era lo que tanto le perturbaba? Podia percibir que algo andaba rondando por su cabeza.

- Simplemente tengo miedo - yo fruncí mi ceño mirándole-

- ¿De que tienes miedo?.

Entonces vi como despego sus ojos de mi y volvió a darle una calada a su cigarro para seguido mirar al suelo y tirar la colilla -

Dejo salir el humo por su boca desinflando su pecho pero yo me negaba a que no me contestara por lo que entre mi mano tome su mentón e hice que me volviera a mirar.

- Dime que te ocurre- sus ojos me miraban bajos -

- No quiero volver- volví a fruncir mi ceño-

- ¿Porque?.

- Porque tengo miedo a que cuando volvamos todo vuelva a ser como era antes.

Al escucharle sentí mi corazón comprimirse ese miedo también existía en mí y era algo en lo que llevaba pensado días y al parecer él también.