Era un jueves cualquiera y como jueves cualquiera no había ninguna fiesta o gran acontecimiento que me hiciera mas amena la tarde por lo cual decidí salir a dar una vuelta por el pueblo.
Las calles estaban tranquilas lo cual era lo normal los exámenes finales estaban a la vuelta de la esquina. Yo sin embargo iba bastante bien mis calificaciones por ahora eran buenas por lo cual no tenia de que preocuparme. Mientras caminaba puede ver a lo lejos a la abuela de Dietrich sacar unas grandes y pesadas. Al parecer Nick tenia razón a pesar de todo Susana había decidido quedarse. No sabia si ella se percataba de algo de lo que había hecho Dietrich pero ella no tenia culpa de lo que hiciera su nieto.
Cada metros que mis pasos me hacían estar más cerca de ella tenia más claro que tenia que ayudarla esas cajas parecían que pesaban mil toneladas.
- Oh no - fue lo primero que dijo al verme - Liv - sus ojos se quedaron observándome por varios segundos al parecer no se esperaba que fuera yo - No hace falta que me ayudes de verdad cielo.
- No se preocupe no es nada creo que estas cajas pesan más que ambas juntas - bromee para dejar algún tipo de tensión a un lado-
- Gracias de verdad no tienes porque después de todo lo...
- De verdad no te preocupes Susana - corte al saber que iba a decir para tomar una caja y entrar hacia dentro con Susana detrás- Esta todo bien.
yo sabia en mis adentros que no pero no podía hacer sentir mal a Susana ella no se lo merecía.
- Liv - yo me gire para verla - Sabes que aquí tienes tu segunda casa si necesitas algo lo agarras sin tener que dar explicaciones, eres bienvenida en mi tienda.
- yo sin saber que decir le di una pequeña sonrisa - Gracias.
Estuve un rato ayudando a Susana con alguna cosas de la tienda hasta que se el sol comenzó a esconderse. Me encanto pasar la tarde con ella aunque estuviera trabajando ella era divertida y los temas de conversación con ella no se acababan. Era la mejor.
- Y para la próxima vez te vienes a mi casa y te hago algo super rico para almorzar - dijo dando varias palmadas en uno de mis hombros - Tengo que compensarte de alguna manera por tu ayuda.
- No me debes nada de verdad.
- Si por favor Liv algún día vente a mi casa quiero q.....
- Creo que eso no seria lo correcto Susana - interrumpí haciéndole saber al instante el porque-
- Esta bien - respondio ahora un poco más decaída y triste - Entiendo pero las puertas de mi casa están abiertas para ti Liv.
Sonreí en forma de agradecimiento.
- Creo que es hora de que me vaya.
- Si seguramente tienes cosas que hacer - respondio Susana acompañandome a la puerta - Gracias de nuevo Liv.
- De nada un placer nos vemos - dije para despedirme de ella con un abrazo -
Salí de la tiendo pero antes de comenzar a caminar mire hacia el interior y me volví a despedir de ella con la mano pero nada más girarme para comenzar a caminar vi a alguien delante de mi observándome con sus ojos negros.
Ambos nos quedamos parados por varios segundos mirándonos. Era la primera vez que me miraba desde que había llegado de nuevo a este pueblo.
Saliendo de este momento tan pesado e incomodo aparte mis ojos de él para después rápidamente comenzar a caminar en su dirección y pasar por su lado como si no existiera.
- Pásame los resúmenes de los exámenes si me los estudio seguramente apruebe- yo le pase mi hoja de resumen a Alex - Por favor información entra en mi - dijo pasando mi hoja por su cabeza.
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𝓘𝓷𝓶𝓪𝓻𝓬𝓮𝓼𝓲𝓫𝓵𝓮
RomanceLiv Cooper una chica criada y enjaulada en la perfección de sus padres se muda a un pueblo pequeño donde comenzará la universidad. En su camino se cruzaran todo tipos de personas pero solamente una dejara una verdadera huella en ella. ¿Sera la per...