Dejé salir un suspiro de mis labios agotada por la situación con Dietrich y comencé a caminar de nuevo hacía el coche donde estaba mi padre esperando.
- Hola papá - saludé entrando al coche sentandome para después dar un beso en su mejilla -
- Hola cariño, te escuché gritar ¿Todo bien? - pregunto mi padre con algo de diversión su voz-
- Ah si todo bien solo que en este pueblo hay algún que otro gilipollas suelto - dije mientras bajaba la ventanilla -
- Para eso estoy yo, para atraparlos - dijo con entonación lo cual ambos reimos -
Después de eso volvimos a casa.
La tarde transcurrió normal y aburrida como de contostumbre. Ahora eran las siete de la tarde y el cielo estaba oscuro con alguna que otra estrellas adornando el hermoso cielo que podía ver desde mi ventana. Cansada de estar sentada haciendo las tareas me levante y fui abajo.
-Hola mamá ¿Qué haces? - pregunte frunciendo el ceño al verla parada mirando un cuadro una y otra vez para seguido moverlo -
- Liv ¿Tú como ves el cuadro? ¿Esta torcido? ¿Verdad? - pregunto dándome la espalda totalmente convencida -
Yo al oírla rompi en risas entonces ella se giró y me observo con el ceño fruncido.
- ¿Qué? - pronunció lo que me hizo reír más- ¿Porque te ríes? ¿Liv,que pasa?- yo sin embargo no podía dejar de reír-
-T-u tu- tu- no podia dejar de reir entonces le señale su mano -
Ella miró donde señale y vio la regla que tenía en la mano.
-¿Es en serio? ¿Una regla? - pregunte para volver a estallar en carcajadas -
- Necesitaba que estuviera perfecto ¡Oye! ¡Deja de reírte! - dijo soltando la regla en la mesa central de la sala - Liv ve a tirar la basura - yo suspire por lo último-
Era increíble como me hacía cambiar de humor esta mujer.
- Espera voy arriba a por una chaqueta - dije cansada para subir las escaleras-
Estando ya en mi habitación busque en mi armario una chaqueta con capucha negra y la agarre pero antes tome mi teléfono de la mesa y fui escaleras abajo.
- Toma - dijo dándome la bolsa de basura - Los vecinos me dijeron que cerca había un contenedor tirala hay y regresa.
Yo en signo de afirmación lleve mi mano recta a mi frente como soldado y salí por la puerta.
Ya en la calle podía sentir el aire fresco envolver mi cuerpo lo que hizo que un escalofrío recorriera mi cuerpo. Mientras caminaba buscaba por todos lados el bendito contenedor de basura pero no lo encontraba y eso me estaba desesperando.
Después de un largo rato buscando enfrente de mi pude ver a un individuo con un gran perro exactamente con un Pastor Alemán de colores negro y marrón. Enfoque mi vista en el individuo que miraba su teléfono detenidamente pero cuando me percaté de quién era di in giró rápido asi dándole la espalda para después colocar la capucha de mi chaqueta por encima de mi cabeza.
Esto no podía ser verdad.
Se que el pueblo es pequeño pero joder ¿No hay más personas que él? ¿No me podía haber encontrado con el rubio de ojos azules? No claro que no. El castaño de ojos oscuros como la noche tenia que estar en todos lados.
Ahora mismo tenia una misión y era que Dietrich no supiera que estaba hay a si qué Liv muévete AHORA.
Cuando levante una de mis piernas para comenzar a caminar justamente pise una rama lo que hizo que su perro comenzará a ladrar en mi dirección.
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𝓘𝓷𝓶𝓪𝓻𝓬𝓮𝓼𝓲𝓫𝓵𝓮
RomanceLiv Cooper una chica criada y enjaulada en la perfección de sus padres se muda a un pueblo pequeño donde comenzará la universidad. En su camino se cruzaran todo tipos de personas pero solamente una dejara una verdadera huella en ella. ¿Sera la per...