Una Oportunidad - Pablo Gavi

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Gio
-Ahora que estamos los dos solos, me podes decir que pasa?
-Nada Gio- Me dijo.
-Estas raro conmigo desde ayer- Le dije.
-Pues te equivocas.
Luego de eso tomé mi celular y no conversamos más en todo el camino. Cuando llegué me bajé del auto y me fuí.

Septiembre se pasó volando y Gavi seguía comportándose distante conmigo, hice la denuncia a los chicos de la discoteca y todavía estaba metida en eso, me quitaron la bendita bota del pie y ya estaba bien.

Era 20 de octubre y estábamos viajando a Sevilla, la mamá de Pablo nos había invitado a una reunión con toda su familia, la verdad estaba un poco nerviosa porque aún no los había conocido formalmente.

Llegamos y lo primero que hicimos fue dirigirnos al camping donde sería la reunión, en todo momento se escuchaba solo la música de la radio ya que ninguno parecía querer hablar. Intenté hablar con Pablo muchísimas veces pero el nunca decía que le pasaba y eso ya me estaba cansando.

Caminamos hacia su familia que estaba sentada en una de las mesas y Pablo tomó mi mano mientras sonreía, el llevaba la canasta y yo el infaltable equipo de mate, cuando lo vieron todos corrieron a abrazarlo, hacia mucho el no asistía a las reuniones por la distancia, después del hermoso reencuentro, que claro que grabé, su familia me miró sonriendo.

-Bueno, ella es Gio Roccuzzo, mi novia- Dijo y me sonrió- Gio, esta es mi familia.
-Es un placer conocerlos al fin- Les dije y rápidamente se fueron presentando uno por uno, eran muchísimos, tenía primos de todas las edades y tenía una pequeña sobrinita.

Todos fueron realmente amables conmigo y me dieron una bienvenida muy hogareña a la que era su familia. Un rato después de haber llegado una familia más llegó al camping.
-Quienes son?- Le susurré a Pablo que estaba sentado a mi lado.
-No lo sé- Me dijo mientras los miraba.

Se trataba de un matrimonio con dos mellizos de 19 años y una nena de aproximadamente 8 años.

-Pablito, ellos son los nuevos amigos de la familia, se integraron hace unos meses- Le explicó su mamá.

Los dos adultos se llamaban Paula y Daniel, sus hijos eran Katy, Mateo y la pequeña Marina. Ellos se presentaron y luego tomaron su lugar.

Todo iba muy bien, su familia me preguntaba por mi vida y me integraban de a poco, sus primitos me invitaban a jugar y así pasamos el día.

Estaba en la canchita viendo a Gavi jugar con su familia mientras se reía, me alegraba que pudiera verlos, el se acercó mientras caminaba lentamente, se veía cansado.
-Vuelvo en un minuto, voy por agua- Me dijo y yo asentí mientras el iba con sus tías a pedirles para hidratarse.

Mateo, uno de los mellizos que ni yo ni Gavi conocíamos se paró a mi lado con más de la confianza que yo le estaba dando.
-Eres su novia no?- Dijo tranquilamente.
-Estoy con él- Le dije
-Eres increíblemente linda en persona, no digo que no lo seas en televisión pero eres perfecta- Soltó de la nada.
-Gracias, que amable- Dije sin prestarle mucha atención.
-Gavi te trata bien? Porque te mereces el mundo entero- Dijo y se acercó.
-Si, es muy considerado conmigo- Le dije extrañada.
-Te parece si nos vamos un poco más allá?- Me preguntó y tocó mi espalda para luego deslizar su mano hasta mi cintura.
-No gracias y por favor quítame la mano de encima- Le dije enojada, el rió.
-No te enojes guapa, aunque te ves preciosa así- Me dijo mientras me acercaba más.
-Te dije que me soltes!- Le contesté y con todo el impulso decidí abofetearlo.

Gavi
Caminé hacia el campo mientras veía a Gio con ese tal Mateo, apuré el paso cuando lo ví tocarla. Me distancie notablemente de Gio luego de enterarme que ella y Nico aún tenían esa conexión pero no permitiría que nadie le pusiera una mano encima.

Estaba a unos metros cuando él la acercó a su cuerpo, Gio lo empujó y su mano golpeó la mejilla de Mateo, "Esa es mi chica" pensé mientras me acercaba, lo malo es que ella nunca sería mi chica.

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Holucha, tenganme paciencia porque empecé el colegio, trato de sacar lo más seguido que puedo.

Las leo, besitos 💋
by: Vene.