Be Mine, Dear [Omegaverse]

Capítulo 24

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El mar estaba brillando bajo la luz del amanecer, entre las olas y la espuma que se mezclaba en cada balanceo, cómo polvo de diamantes que resplandecía. Reflejaba el azul del cielo y las nubes que viajaban lentamente como un enorme espejo. Parecía tan lleno de vida, tan colorido, la arena destellaba, las palmeras que se agitaban y el horizonte parecía no tener fin. Increíble, como una pintura y casi le dieron ganas de detener el tiempo un poco.

— ¿Qué tal? La vista es muy hermosa ¿No?

— Huele a pescado ahí afuera.

Riéndose entre dientes, Akiteru, que acababa de entrar a la habitación, se acercó al rubio que se encontraba parado frente al balcón, entre cortinas que bailaban con la brisa y la luz que se derramaba sobre una piel tan blanca y pura como la nieve.

— No tienes que exponerte a eso sí no quieres, hay muchas actividades interesantes dentro del hotel — dijo él — lo remodelaron cuando este año empezó, estoy seguro de que vas a descubrir que es más interesante de lo que fue la última vez que vinimos, pedí que me enviaran todos los folletos, mira.

El rubio volteo, la brisa agitando su cabello, tan cálida y agradable, la luz reflejándose como finos hilos de oro — No tenías que hacerlo, pensaba bajar y preguntar a alguno de los empleados después del desayuno — recibió los folletos de manos de su hermano.

— No es un problema, es la primera vez que los dos salimos juntos de viaje y estaba esperando que pudieras tener una estadía agradable...estoy un poco emocionado — se acercó y señaló el folleto en la parte superior — Te gustan las manualidades ¿No? Esta es una actividad que puedes hacer por las mañanas, los cupos son limitados, así que no tienes que preocuparte por lidiar con un gran grupo de personas. Puedes navegar por el mar y ver a los delfines, recibir masajes, pedir un guía para que te lleve por los sitios más populares de la ciudad, puedes ir de compras cuando quieras; la seguridad es muy buena, te darán un auto y dos escoltas también.

— ¿Aquí también voy a tener escoltas?

— Papá y mamá lo prefieren así, sabes que no están acostumbrados a separarse de ti — dijo — Yo voy a estar ocupado trabajando, así que no voy a poder acompañarte mucho por ahora, pero te prometo que voy a estar ahí cuando todo termine; hablé con nuestro padre y está de acuerdo con que nos quedemos por un par de días más antes de volver...vamos a ver juntos a los delfines, vamos de compras o cenemos fuera; escuché que el ambiente nocturno es muy animado.

— ¿No estás muy emocionado con todo esto?

— No quiero que te aburras, sé que no te gusta mucho salir de casa.

El menor miró los folletos, en realidad eso podía ser verdad, no solía salir a menudo, así que podría ser que estuviera un poco perdido. Estos folletos podrían servir, al menos como opciones.

— No es una temporada alta, así que los alrededores van a ser más tranquilos. La playa es privada, puedes ir y pasear por ahí cuando quieras, algunos artistas hacen esculturas con arena y escuché que son impresionantes...tal vez todos quieran hacer una en honor a ti en cuanto te vean — volvió a contar él en una risita alegre — Muchos jóvenes de tu edad se reúnen ahí; practican surf, juegan partidos y otras actividades...estoy seguro de que va a ser interesante, puedes hacer nuevos amigos ¿No? Conocer otras personas tampoco está mal.

— Supongo — murmuró él.

Y también suponía que este era su objetivo al invitarlo aquí. No era como que no lo hubiera notado desde el principio, sin embargo no sabía que tan bueno podría ser empujarlo a conocer a extraños. Cómo fuera, no estaba pensando en eso, había otro asunto aquí, uno importante que no sabía cómo manejar.