Be Mine, Dear [Omegaverse]

Capítulo 51

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El viento que entraba por la ventana le acariciaba las mejillas, frío. El invierno se agitaba y en el cielo flotaba una espesa masa de nubes grisáceas, tan oscuras y melancólicas, tan inquietantes que no presagiaban nada bueno. Quizá iba a nevar otra vez, los últimos tres días habían sido muy problemáticos, entre nevadas nocturnas y una pequeña y fría llovizna vespertina, la ciudad estaba hecha un lío, los autos apenas cruzaban a través desde entonces, el flujo de clientes disminuyó y cada día era cada vez más apagado sin Kei.

— Hey ¿Qué es exactamente qué es lo que estás haciendo ahí?

Kuroo respondió primero a las palabras de Bokuto con un pequeño golpe de la punta de su bolígrafo sobre el papel frente a él, no despegaba esa mirada melancólica de la ventana. Suspiró, sus pestañas se agitaron y el corazón se le apretó; se estaba preguntando cuando iba Bokuto a empezar a perder la paciencia — Lista de invitados, no hay muchas personas en el lado de mi familia, pero mi padre tiene muchos socios y amigos cercanos y pensaba que sería bueno invitar algunos...de esa manera la familia de Kei podrá saber que tenemos un respaldo fuerte.

— Oh ¿Estoy en la lista? Me diste el puesto de padrino ¿Verdad? Sé que no debería preguntar algo tan obvio, pero quiero una confirmación ¿Lo soy? No sé lo pediste a tu hermana antes que a mí ¿No?

— ¿Un padrino? Oh, en realidad...— murmuró — Estaba ese asunto ¿Verdad? No lo había pensado.

— ¿Qué? — la pequeña sonrisa en los labios del bicolor se congeló — No puede ser ¿No lo soy? Entonces ¿Quién...? — Bokuto se levantó apresuradamente del pequeño sofá y alcanzó la hoja sobre el escritorio, su mirada frenética agitándose por todos lados — ¿Quién es ese? Kuroo ¿Cuándo lo conociste? ¿Cuándo pensabas...? ¿Eh? — apretó los labios, miró al hombre moreno que ni siquiera le había prestado atención y lo llamó con cuidado — Kuroo...esta lista...

— Es una lista de invitados, está casi terminada, estoy seguro de que estás ahí...eres mi mejor amigo, no hay ninguna otra persona que pueda ocupar...

— No, no me refería a eso, es solo qué...— devolvió la hoja al escritorio y la empujó con cuidado hacia a Kuroo — La ensuciaste un poquito.

— ¿Yo? No, eso no es posible, no he...— la tomó y calló con un jadeo de agitación. No...— ¿Cuando...? — esas líneas y puntos sobre el papel ¿Cuando sucedió? ¿Fue Bokuto? No era posible y miró al único objeto inanimado sobre el escritorio como el culpable. Lo arrojó a la basura con resentimiento — Trabajé una maldita hora en esto.

— Todavía se puede leer, lo voy a volver a escribir por ti...es lo que un padrino hace ¿No? — tomó la hoja, recuperó el bolígrafo y arrastró una silla — Está bien si pongo mi nombre primero ¿Verdad? El papel del padrino es uno de los más importantes, así que debería resaltar más que los otros invitados...usemos un mejor color también.

— No hagas dibujos en él.

— Puedo ser serio con esto, confía en tu padrino.

Bokuto tarareó y ojeó por un momento la lista en sus manos, Kuroo lo dudó un poco porque todavía se acordaba de como este chico trató de ayudarlo amablemente con la contabilidad de la tienda y casi se metió en problemas. Por supuesto esto era solo una lista y él solo tenía que copiar, pero seguía con esa sombra psicológica.

— ¿Kenma va a la fiesta?

— Está invitado, pero dijo que no quería ir...no sé porque parece que le tiene miedo a Kei.