Capítulo 15

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Tsukishima agitó los dedos sobre un par de pequeños pendientes en forma de flor y se mordió con cuidado el borde del labio, se veía bien, estaba bien. Asintió, le gustaba bastante, estaba satisfecho. Entonces se inclinó lentamente y echó un vistazo al muy amplio taller, fuera de la puerta abierta, a la persona que colocaba alfileres y agitaba una hermosa tela Borgoña sobre un maniquí. Sonrió, lo hizo por qué los ojos que voltearon a mirarlo como habían hecho todo este tiempo encontraron los suyos y una sensación emocionante y extraña estalló en él, como si cosquilleara en su estómago y pintara sus mejillas en pinceladas. 

La daba vergüenza, sonreía, huía de su mirada y se mordía los labios con cuidado en un intento por no sonreír. Ese chico no estaba perdiendo el tiempo, Kuroo, era tan entusiasta que, honestamente, no sabía qué hacer.

— Kuroo y tú...supongo que algo bueno sucedió recientemente ¿No?

— ¿Nosotros? — Tsukishima saltó repentinamente y se sonrojó — Ah, no...— se humedeció los labios y volvió a acariciar los pequeños y lindos pendientes en sus dedos, comprobó el pequeño seguro, lo flexible que era y también su firmeza. Trataba de calmarse en el proceso, pensar racionalmente — No hay nada que sea especial, solo...escuché lo que sucedió, sobre usar sus diseños para una película y es algo bueno para todos ¿No crees? Es una oportunidad difícil de encontrar.

— Ah, claro, por supuesto...— Akaashi le sonrió, Tsukishima sabía que no insistiría con eso, pero también entendió que quizá no estaba tomando su explicación de la manera que quería.

La atmósfera últimamente era un poquito sutil entre él y Kuroo desde la noche de su fiesta de cumpleaños. La razón era muy obvia, los dos se besaron, Tsukishima permitió que él lo besara, esta vez fue diferente de la vez anterior y los sentimientos, las emociones que vinieron con ello, fueron tan cálidas y extrañas, y decían mucho de lo que era su relación actual, en que se estaba convirtiendo esta, sin embargo, al mismo tiempo, también era ambiguo y confuso. No quería caer tan fácil, estaba seguro de que tampoco le gustaba tanto, aun así sus acciones y emociones eran muy contradictorias.

Nunca tuvo nada como esto, nunca conoció a nadie, tampoco estaba interesado en el romance, así que no sabía exactamente cómo funcionaba esto. Los Alfa eran idiotas ¿Él le iba a pedir salir ahora? No odiaba la idea aunque no fuera su plan inicial, sin embargo no sabía si le gustaba hacerlo de esta manera. Era demasiado fácil ¿No? Kuroo era tan bueno en esto que tal vez ya lo dio por hecho y Tsukishima no quería eso, no podía ceder solo así.

No quería que Kuroo creyera que estaba demasiado ansioso por él, no quería que pensara que lo ponía ansioso o que estaba suspirando por su causa porque era una tontería. Solo le gustaba un poco, pero le había permitido besarlo, así que lo mínimo que podía hacer era confesarse y pedirle una oportunidad humildemente, tenía que ser pronto también de esa manera él podría considerarlo y ver qué tan bueno era para impresionarlo. La confesión debería ser algo que no esperaba, algo que lo sorprendiera y lo conmoviera, también debería...

— Eres increíble, Tsukishima.

— ¿Qué?

Akaashi sonrió lentamente, sus ojos entrecerrándose — No trató de ofenderte, pero...— el moreno cruzó la puerta y arrastró una silla de la esquina, se sentó a su lado, una niña increíblemente parecida a él se asomó justo después, su cabello peinado en coletas cayendo hacía un lado — Hace un momento parecías avergonzado y dulce, un segundo después te veías como si estuvieras pasando alguna clase de dificultad, después te enojaste y...bueno, creo que nunca he visto a alguien cambiar tan rápidamente de rostro como tú ¿Seguro que todo está bien?

Be Mine, Dear  [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora