☾︎☀︎︎|maite|☀︎︎☽︎
Las luces del boliche nos estaban pegando en la cara a Luca y a mí. El morocho estaba tomando champagne con speed, yo me estaba tomando un buen vodka con jugo.
Mi compañero no estaba queriendo ir a bailar, porque según él apenas podía caminar. Pero yo quería bailar, era lo único que necesitaba en estos momentos.
Nos pasamos un poquito de copas...
— ¿Sabes lo qué es dejar de tomar?. —me mira, sacándome el vaso.
— no quiero dejar de tomar. —me acercó a él, casi cayendome.—, Ay, agárrame.
— listo, vamos que te llevó a tu casa. —me agarra fuerte por la cintura.
— a mi casa no, mi mamá me va a retar. —negué, mirándolo.
— bueno, vamos a mi casa entonces, necesitó que camines bien, escúchame. —agarra mi cara, dónde nos quedamos mirando.—, Buscamos las cosas y nos vamos.
Luca me seguía hablando y indicando que caminé a la par de él, pero yo no podía prestarle atención, lo que menos estaba haciendo era eso.
Me perdí en la mitad de lo que dijo, porque no podía ser tan hermoso. El alcohol una vez más me estaba jugando una mala pasada, pero con Luca soy capaz de tirarme al agua.
— ¿Me das un beso?. —lo interrumpo, y termino soltando una risita.
— ¿Qué?. —me pregunta, poniendo cara de boludo.—, Estás re mal, vamos.
No me deja hablar más, me agarra la mano y empezamos a caminar entré la gente. Luca pasó el número de muestras cosas y nos pasaron todo.
También me compro una botellita de agua, dónde me quedé tomando mientras Luca se ponía su campera y buscaba las llaves de su auto.
— pensé que la salida de ex's iba a salir peor, pero bastante bien. —me reí, terminando de tomar agua.
— terminaste empedo Maite, tu vieja me mata boluda. —se queja, mientras salíamos del boliche.
— Luca, Luca ¿Nos podemos sacar una foto? Por favor. —se acerca una piba, yo la quedó mirando.
— si obvio, dale. —contesta Langoni.
Yo me quedé paradita al costado mirando la situación, la mina hizo cómo si yo no estuviera y supongo que estaba bien, mejor.
— sos tan lindo. —le toca el hombro, haciéndose la linda.—, Unas ganas de darte un beso.
No se porque al escuchar eso se me hirvio toda la puta sangre, empecé a tener más calor de lo normal.
— ¿No te das cuenta qué está conmigo? Desubicada. —me acerque a la mina.—, Raja de aca loca.
Luca mira sorprendido la situación, vale aclarar que estoy bajo efectos del alcohol. Pero me agarraron los celos, no es mi culpa.
— ay gordi... No pensé que había vuelto con vos. —pone cara de asco.—, Más teniendo a la diosa de Nadu atrás.
— te voy a arrancar todo ese pelo en pausa que tenes. —me quise tirar encima, pero Luca me termina alzando.—, ¿Qué haces? Soltame, le tengo que pegar.
— no le vas a pegar a nadie Maite, no te podés cagar a piñas porque si. —me habla, ya afuera del boliche.
Cómo si fuera una nena chiquita que acababan de retar, me agarra del brazo al dejarme en el piso.
— tengo que ir a hablar con los que estaban con la piba. —me explica.—, Tengo que pedir que no digan nada, se complica todo.
— que digan lo que quieran. —hice hombritos, estaba enojada.