D E S A N I V E R S A R I O
segunda temporada
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maite
▬▬▬▬▬▬▬▬▬▬— amor, llegué. —le avisé a Luca, dejando las llaves sobre la mesita.
Volví del gimnasio echa mierda, lo único que quería era estar con Luca y nuestro hijo, los necesitaba tanto.
Pero al entrar a la sala me encuentro con mi hijo sobre los brazos de su papá, no puedo evitar sorprenderme al ver a los amigos de mi novio, estaban Seba y Nico, sus amigos del barrio.
— llegó la ley. —se ríe Nico levantándose para saludarme.—, ¿Todo bien Mai? ¿Cómo estás?
— bien. —sonrió mirándolos.—, ¿Ustedes?
— hola Mai. —se levanta Luca y me da un beso, yo agarré a Paulito.—, Seba ella es Mai, mi novia, Mai, él es Seba.
Bueno, esperaba un "mi mujer" ¿Mi novia? Ah bueno, ¿Dónde está el Luca qué me presentaba cómo su mujer?
Seba me dedica una sonrisa y yo trato de hacer lo mismo, pero Luca no me avisó nada de esta juntada.
Voy hasta la habitación sin decir nada, cambie a Paulo, le dí la teta y lo hice dormir. Me busque ropa para bañarme, me meto a bañar rápido y tratando de pensar.
Salgo del baño con una toalla sobre mi cuerpo solamente, veo a Luca acostado al lado de Paulo mientras le hacía mimos. Agarré la ropa y me di vuelta para volver al baño.
— ¿Estás enojada? —me pregunta antes de que entré al baño.—, Cayeron sin avisarme amor.
— está todo bien, no pasa nada. —me di vuelta para mirarlo.
— hoy hacen un asado en la casa de Seba, ¿Te parece si vamos? —juega con su pulsera nervioso.
— la casa de Seba me suena a que va a estar la hermana. —me río y le doy la espalda para ponerme la ropa interior.
Me estaba terminando de abrochar el corpiño y siento cómo Luca pasa sus manos alrededor de mi abdomen, recorrió mi abdomen con uno de sus dedos.
— te estoy preguntando si querés que vayamos, decidís vos. —me habla dejando besos en mi espalda desnuda.
— es obvia la respuesta, Luca. —agarró mi remera, pero él me la saca de las manos.
— vamos al baño un ratito. —abre la puerta y hace que entremos los dos.
Me llevó contra la pared y se encargó de recorrer mi cuerpo completo, el corpiño que me había puesto hace cinco minutos atrás ya no estaba.
Apretó con fuerza mi cintura pegandome a su cuerpo mientras me daba besos en el cuello.
— no podés estar tan buena. —me agarra la cara haciéndome que lo miré.—, ¿Cómo haces? Sos arte.
Tire mi cabeza hacía atrás al sentir cómo Langoni me estaba tocando. Se sacó la remera y bajo su pantalón junto al boxer, sin pensarlo dos veces se acomodó entré mis piernas y empezó a entrar en mí.