☾︎☀︎︎|maite|☀︎︎☽︎
Me subo al auto apenas salgo de la ginecóloga, me quedo unos minutos sosteniendo el volante mientras miraba un punto fijo, estaba perdida, no se que hacer.
Dejó los papales adentro de la butaca del auto tratando de ignorar todo, comienzo a manejar mientras escuchaba un poco de música, hasta que me entró una llamada, de Luca.
— mi amor. —atendí bajandole a la música, y subiendo el volumen de la llamada.
— ¿Dónde estás? Llegamos con Max a casa y no estabas. —cuestiona frustrado.
— estoy en el super gordo, ¿Hace falta algo? Decime así compro. —digo mientras entraba a la avenida.
— a mí me hacen falta tus besos. —me dice y yo sonrió.—, Igual también quiero comida, tráeme comida.
— bueno amor, ahora en un toque voy.
— te amo. —me dice antes de cortar.
— te amo más turrito.
Corté la llamada y desvíe mi camino hasta el supermercado, dónde tuve que comprar cosas de la casa claramente. Esto de que mi mamá se haya ido y estar independizandome no es tan bonito, aunque bueno Luca me esta ayudando bastante.
Llegué a casa después de una hora, deje las bolsas sobre el piso y puedo darme cuenta que estaban el changuito y mis sobrinos tomando mates con Luca, mi novio en sus brazos tenía a Aitana dándole la mamadera, mientras Lionel estaba con una zarpada cara de orto.
— ¿Y mi hermana?. —pregunto saludando a mi cuñado.
— hola Mai, te extrañé. —me dice Zeballos rodando los ojos.
— mi mami está haciendo unas últimas cosas para poder irnos a casa. —explica Lionel abrazado a mi pierna.—, ¿Me vas a extrañar tía?.
— si, mucho. —lo alcé sonriendo.—, ¿Por qué estabas con tanta cara de culo?.
— porque mi tío está agarrando a mi hermana. —rueda sus ojos, por lo menos le empezó a decir hermana.
Me senté con mi sobrino en mi falda, Luca seguía con Aitana en brazos y no pude evitar mirarlos, más que nada después mire el papel que había adentro de mi bolso.
Tengo muchas emociones juntas, no me sale explicarme cómo me siento en estos momentos, es todo muy confuso.
— tenés caramelos tía, yo quiero. —mete la mano en mi bolso... Tirando todo.
La mirada de Zeballos y Langoni van al papel que cayó justamente boca arriba de ellos, fui flash al sacar a Lionel de encima mío y agarrar mis cosas.
— ¿Fuiste al médico?. —me pregunta Luca arqueando una ceja.
— ¡Lionel!. —lo reta Exequiel.—, No tenés que andar metiendo tus manos en los bolsos de los demás.
— perdón tía. —me mira haciendo puchero.—, Fue sin querer.
— voy a bañarme. —me levanto con mis cosas en la mano.—, Si podés guarda las cosas que traje porfa. —mire a Luca.