Llamas Cruzadas

Capítulo 4

-¿En serio no vas a desistir?- ambos estábamos bajo las sabanas, habíamos tomado un baño juntos, pero no podía alejar de mi mente el hecho de que ya no lo vería en el trabajo. Ni pasaríamos el rato juntos, mientras yo me encuentre en el trabajo el estará en casa y viceversa.

-A dormir- se giró sobre la cama dejándome del lado en que me encontraba. -Es mejor así, si tenemos el turno diurno podemos llevar una vida normal.

-¿Como que vida normal? ¿Acaso no la llevamos ahora?- pronuncié divertida

-Mudarnos juntos, tener hijos, esas cosas.

-Oh- aquello me sorprendió -No sabía que querías hijos, es decir...

-Se que no hemos hablado de eso- volvió su cuerpo hasta quedar frente a mi, ambos sobre la cama. -Pero ya tengo 30 años, tengo trabajo y ahorros, es lógico que quiera sentar cabeza con la mujer que amo. ¿Tu no?- negué

-No es eso. Si quiero tener hijos en un futuro. Solo me sorprendió aquello. Es decir, no creí que tu también quisieras.

-¿Te parezco un ogro anti-bebés?- pronunció con diversión -Solo imagina aquello, tendría lo mejor de ambos. Tendría tu genes y parecido y mi apellido- aquello me hizo explotar en rizas.

-Um, supongo- me acerqué a el para abrazarlo, estaba más cómoda ahora, también me hacía ilusión aquello. Lo amo de eso no hay duda. Y tener una familia con el hombre que amo sería maravilloso.

...

-Escuché que Namjoon pidió ir al diurno. ¿Pasó algo entre ustedes?- negué

-No, solo es una buena oportunidad para él. Le dieron el liderazgo al señor Min, así que decidió aceptar el que se le ofrecía.

-¿Y tú?- Clau parecía verdaderamente preocupada.

-Estamos bien, mejor que nunca- pronuncié con emoción.

-¿Cogieron? ¡Cogiste!

-Si y no- más bien eso -Lo hicimos, yo arriba como dijiste.

-¿Y esa cara? ¿No te gustó?

-Me gustó, mucho. Pero a él no.

-No puedes saberlo.

-No terminó, si estoy arriba no termina y si lo esta el no puedo siquiera dejarlo entrar- suspiré

-¿Entonces se la chupaste?- negué

-Solo se alejó y se masturbó. Me hizo sentir mal, solo vi por mi placer y cuando el deseaba el suyo no lo dejé entrar nuevamente.

-No sobre pienses las cosas. Tuvieron relaciones, eso es un avance. Luego de tanto juntos al fin lograste aquello. Todo será más fácil desde ahora, créeme. A menos que debas irte para proteger a los que amas y tu novio decida que es buen momento para comportarse como un crío y dejar de hablarte.

-Lo siento, te lleno de quejas sobre mis tonterías cuando tienes problemas más serios que los míos.

-No son tonterías, creo que deberíamos irnos de fiesta. Hoy no trabaja May, ¿porqué no vamos a su departamento apenas salgamos de aquí y bebemos como perras?

-¿No le molesta?

-No, está en prácticas en la universidad y se la pasa cocinando para sus cursos. Un rato de bebidas le vendría muy bien.

Así como lo dijo y apenas terminó nuestro turno tomamos un baño y nos cambiamos de ropa. La noche fue movida para todos, Jimin tenía la noche libre así que Hoseok y yo no tuvimos descanso.

Lo notaba decaído también pero no me atrevía a decirle algo. Supongo que el espera a que ella se disculpe y ella a que lo haga él.

Cuando llegamos la puerta del departamento estaba abierta, dentro estaba Hoseok guardando algunas cosas en una maleta. La cara de Clau hizo una casi imperceptible mueca de disgusto que acabó con sus cosas siendo lanzadas sobre el suelo y saliendo del departamento con rumbo al de su hermana.

La seguí con prisas, tocaba la puerta con insistencia y sabía que se contenía para no llorar frente a la puerta.

-Vete- dijo tajante cuando un agitado Jimin nos abrió, llevaba un pantalón corto y crema batida en el rostro.

Abrí mucho los ojos al darme cuenta de que también escondía una erección entre los pantalones. -Vamos a la mía- pedí pero esta ya estaba sobre el sofá comiendo un postre que parecía ser la tarea de su hermana. -Lo siento- pronuncié por lo bajo mientras me adentraba al lugar.

-¿Está en el departamento?- asentí ante su pregunta y luego de adentrarse al cuarto y regresar con una camiseta se perdió fuera del departamento.

Su hermana salió del cuarto luego de unos minutos, iba recién bañada. -Maldita folladora- dijo la otra y se dejó ir en lágrimas por primera vez en todo el rato. -Quiero beber y comer.

-Te comiste mi tarea- pronunció sin un ápice de enojo. -Vamos a beber entonces. Tengo un Wiskhy que me regaló mi suegro. ¿Quieres?

-Quiero- secó sus lágrimas -¡Ese maldito imbecil! Me hace enamorarme de él para luego dejarme, maldito imbecil. Ya no es mi amor bonito.

...

Cuando al fin Clau logró calmarse lo hizo abrazada a una botella, se durmió y me despedí de su hermana cual se encontraba atareada terminando el nuevo postre cual debía llevar a la universidad.

No había bebido mucho, pero tampoco tenía sueño, así que decidí ir a ver a Sargento Bebé, pasé todo el camino recordando lo destruida que se veía mi amiga y aquello me rompía el corazón.

-Hey- saludé pero este estaba al teléfono, me dejó pasar y continuó con su conversación hasta que me alejé hasta la cocina. Cocinaba algo así que que me di a la tarea de removerlo mientras regresaba.

-¿Que es?

-Una llave- dijo lo obvio -Te la pasas aquí metida y odio desplazarme para abrir la puerta.- lo miré atónita

-¿Me acaba de dar las llaves de su casa? ¿Sabe lo confianzuda que soy?

-Lo se, no me hagas arrepentir de esto.

Esto va a doler 😩

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