-Ya llegué- vociferó y el correteo de Sargento me hizo reír, luego corrí tras él -Ah, cúbrete.-¿Está loco? Traigo pantalones- levanté el suéter dejando ver que si llevaba. Cortos pero ahí estaban. -¿Trajo de comer?
-Pollo frito, papas y jugo de naranja.
-Va con cerveza
-Tenemos que ir a trabajar en unas horas.
-Ah ¿puede posponerlo? Es el jefe.
-¿Qué quieres doblar turnos?- mi boca se abrió por aquello, es un tirano.
-Comamos en el sofá, veamos una película juntos. Se que no le gustan pero...
-Si me gustan, las que no me gustan son esas raras de la otra vez. ¿Porqué mejor no comemos en silencio?
-¿Porqué mejor no hablamos mientras comemos?- puso los ojos en blanco pero tomó las bolsas para ir a la sala.
Llevé las bebidas y las coloqué en el lugar, comenzamos a comer pero ninguno decía algo, siempre quise preguntarle directamente sobre lo que pasó con su difunta esposa, creo que nunca me daré el valor.
Es decir, ¿quién en su sano juicio engañaría a un hombre como él?
Es Perfecto
Protector, trabajador, conversador a pesar de que trate de negarlo, ordenado y limpio. Es el perfecto ejemplar, atractivo también.
-Deja de mirarme y come.
-Señor Min
-Um
-¿Puedo preguntarle algo?- Este había terminado de comer, yo por mi parte tenía mi porción casi intacta.
-¿Ahora preguntas antes de preguntar?- mi ceño se frunció
-¿Dejó a alguien muy malherido alguna vez? Cuando peleaba en la calle.- quise preguntarle sobre su esposa pero no quería incomodarlo así que decidí alimentar mi curiosidad de otra manera.
-Sí- abrí la boca en modo de sorpresa -¿Me creías débil?- casi sonó ofendido.
-No, obvio no. Sólo que es un hombre tan educado que no lo veo de esa forma.- aquello lo hizo reír
-Cuando tu padre fue por mi aquella vez no parecías pensar lo mismo.
-¡Tenía 10 años! Es lógico que si veía a un hombre...
-Joven
-Bueno, es lógico que si veía a un joven golpeado en la comisaría iba a pensar mal.
-Um
-Señor Min.
-El Señor Min debe darse una baño para ir al trabajo. La señorita Kim debería comer y hacer lo mismo porque sino el Señor Min la dejará botada.
-Mejor ¿no? Así no voy al trabajo.
-Si no te gusta tu trabajo puedo despedirte- dijo luego de ponerse de pie para entonces perderse por el pasillo.
Como mandó acabé de comer y luego de organizar todo comencé a preparar las cosas para el baño. La casa era amplia, contaba con dos baños para invitados, uno en cada planta, más solo tenían retrete y lavamanos. El único de la planta baja con ducha era el suyo, así que usaba ese cuando este terminaba o viceversa.
El segundo piso no me gusta, las paredes son gris oscuro por lo que la luz no alcanza, tiene varias puertas y un pasillo extenso que odio. Me siento observada así que no subo ahí.
Aún recuerdo las burlas del Señor Min cuando le dije que no subiría allá, me dijo niña miedosa por semanas. Eso soy, pero no tiene que recordármelo.
Cuando regresaba a la sala en espera de ser llamada para usar el baño su teléfono resonó sobre la mesa, noté el nombre
"La mamá de Minie"
¿De dónde me suena ese nombre?
La perrita del parque y su dueña.
-Seona- llamó y tomé mis cosas
-Lo llamaban al celular- informé -La mamá de Minie.
-Oh, Ana, esperaba su llamada. Llevará a Minie al veterinario para ver si aquello fue más que solo un encuentro fugaz.- sonrío ante aquello.
-Vaya. ¿Acaso quiere que se haga cargo de los cachorros?- negó
-Yo me ofrecí.
-Pero no fue culpa de Sargento.
-No lo hice por eso. Quiero conseguirles un lugar, o quedarme con uno cuando decidas llevarte lejos a mi bebé.
-No haría eso- en mis labios se hizo un puchero de manera inconsciente -Lo ama más a usted incluso.
-Y está registrado con mi apellido- informó
-¿Que es esto? ¿Una guerra por la custodia? Bien puedo mostrar las grabaciones de las cámaras cuando lo tomé.
-Bien puedo desaparecerlas- dijo burlón y aquello me hizo abrir la boca por su descaro mientras salía del cuarto.
Me di una ducha y lavé mi cabello, siempre amé el olor de su shampoo, me tenté a usarlo pero sería raro así que solo lo olí.
Cuando salí ya lista este jugaba con Sargento bebé en el suelo de la sala mientras dejaba ver su sonrisa, sin duda amaba mucho a Sargento Bebé. ¿Cómo podía alejarlo de él?
-Señor Min- llamé -¿Porqué los chicos del diurno no quieren el nocturno? Es decir, se niegan a suplantar a alguno cuando están de vacaciones o cuando se lesionan- dije recordando que no hubo ningún voluntario los meses que Jimin estuvo en casa.
-Son unos supersticiosos- rodó los ojos -Según se cree, si el Capitán de una estación muere en labor, se debe esperar al menos un año para que alguno del turno contrario asista. Pues se dice que se lleva la muerte con el, entonces alguien del suyo muere. Una estupidez.
-¿Y en qué se basan? Es decir, deben haber precedentes ¿no?
-La Estación 2, ¿sabes cuál es?- asentí -Hacen unos 3 años murió la Capitana, dos meses después dos de sus subordinados, entonces mientras encontraban novatos uno del nocturno fue a ayudar, murió en un incendio y al día siguiente uno de sus compañeros murió ahogado. Ellos hacían rescate acuático.
-Pero si sólo es uno no creo que...
-La Estación 5, está en Ilsan. Hace 5 años no tiene Capitán a cargo, solo Sargentos como la nuestra. Su capitán murió asfixiado por el humo, el del diurno dobló turnos para ayudar y también falleció. Entonces la estación 6 envió al suyo mientras que esta se quedaba a cargo de uno de sus Sargentos, también murió. Ningún Capitán va allá y cuándo deciden ascender a alguno de sus miembros, renuncia.
-¿Y usted cree en esas cosas?- se encogió de hombros.
-Ven aquí- me llamó y me acerqué, golpeó mi frente con su mano abierta. -¡¿Estás loca?!, este es el trabajo más peligroso que existe. Literalmente arriesgamos nuestra vida cada día. Es lógico qué muchas vidas se pierden en el cuerpo. Busca las cosas, nos vamos.
-Ahora tengo miedo.
-Si te quedas sola aquí las paredes grises van a atraparte- hizo resonar su voz de manera siniestra.
-Sargento Bebé- llamé para que me acompañara y el otro se carcajeó con mi desgracia.
Creo que la escritora es Team Min 🙃
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Llamas Cruzadas
FanfictionNo hay algo más ardiente que un grupo de bomberos sexys.... Si lo hay de hecho, Un grupo de bomberos sexys y cachondos.