Davina
"Me asomé por la puerta de la habitación de mis padres lentamente, hace unos minutos los había escuchado discutir y de la nada se habían callado.
—¿Papi?
Vi a mi padre haciendo una maleta sobre la cama.
—¿A dónde vas? —me acerqué a él.
—Me voy de aquí. —dijo enojado. Abrí mucho los ojos negando— Tu madre y yo nos vamos a divorciar.
—¿Voy a ir contigo? —pregunté bajito con miedo a lo que me contestara.
Se quedó quieto, me volteó a ver y negó.
—Pero yo quiero ir contigo. —lo abracé con fuerza— Déjame ir contigo, me portaré bien, lo prometo.
—Lo siento, tesoro, pero vas a quedarte aquí. Por lo menos por un tiempo.
Comencé a llorar negando, abrazándolo más fuerte. Él no me podía dejar... era lo único que tenía, no me podía dejar sola.
—Por favor no me dejes. —sollocé— Papi, no me dejes con ella. —lo miré— ¿Te vas por mi culpa?
No me contestó.
Se arrodilló frente a mí para besar mi frente, luego se levantó, cerró la maleta, la tomó y salió de la habitación. Yo fui detrás de él llorando, pero me ignoró.
Me ignoró y se fue."
"—¿A dónde vas?
Mamá estaba al final de las escaleras con dos maletas a su lado.
—Mamá... ¿a dónde vas?
Me ignoró.
Bajé las escaleras hasta estar frente a ella, estaba en su celular, mandando un mensaje creo.
—Mamá...
—Me largo de aquí. —me miró enojada— Ya estoy harta de ti y de tus estupideces.
—Pero estoy haciendo las cosas bien... —me asusté.
—¿Bien? —tomó mi mandíbula con fuerza— Bien sería que me hicieras caso, bien sería que dejaras de comer y dejarás de verte gorda para que te contraten, bien sería que fueras una buena modelo, pero sólo eres un asco.
Eso dolió, dolió mucho. Más viniendo de mi mamá.
—No te puedes ir, no me puedes dejar sola... —mis ojos se llenaron de lágrimas— No me dejes sola...
Ella rió.
—Tienes dieciocho años, los cumples hoy, así que ya no eres mi responsabilidad.
—Mamá, por favor... ¿qué voy a hacer?
—Eso ya es problema tuyo.
Me empujó a un lado tomando sus maletas, abrió la puerta y salió de la casa.
Me dejó sola...
Papá también me dejó sola...
Y es mi culpa...
Si hubiera hecho lo que me decían no me hubieran dejado..."
Davina...
Escuché que me llaman. Me removí abriendo los ojos poco a poco.