La Ninja Lobo de Konoha 2

43.

En otro lugar algo lejano, Juuri aterrizó de golpe contra el suelo, en la lejanía escuchaba la risa de Madara. Con dificultad, abrió los ojos y se incorporó, estaba en una especie de templo, destruido, eso sí, pero vacío.

—Bienvenida a tu prueba, Juuri, "La Ninja Lobo de Konoha" —le dijo Madara, aunque más bien parecía como si se burlara.

—¿Cuál es la prueba? —le preguntó ella mientras sacaba sus kunai.

—No es contra mí, es contra ellos.

—¿Ellos?

—Sí —respondió y desapareció, luego volvió a aparecer a sus espaldas mientras la tomaba del hombro y la hacía girar—, ellos.

—No... ¡¿por qué haces esto?! —le reclamó cuando vio ante ella a los cuerpos resucitados de su familia y antiguo equipo.

En los extremos de la formación estaban Yukito y Shen, pero ya no eran los chicos de dieciséis años que ella había conocido, los veía ligeramente mayores, los que seguían, eran sus abuelos maternos y finalmente en el centro, estaban sus padres.

—Juuri, has crecido —le dijo su madre, el cuerpo de Juuri comenzó a temblar.

—Preguntas por qué, ¿no? —susurró Madara, luego golpeó la parte trasera de sus piernas, haciéndola caer de rodillas—. La respuesta es sencilla... Porque te odio y quiero verte sufrir.

—¡Yo no te conozco..! —se quejó, sin embargo, tuvo que dejar de hablar, ya que de la nada, una shuriken se clavó frente a ella.

—Oh, yo no me preocuparía por los detalles ahora, Juuri... Ellos tienen la orden de matarte si aparece Kakashi, pero de momento, sólo quieren hacerte mucho daño, ¿no es así, muchachos?

—Juuri... No pensé que nos fuéramos a encontrar en este mundo otra vez —le dijo Yukito.

—Ni yo... Te ves bellísima, pero ese sujeto tiene razón, ahora... Todos queremos hacerte daño, por favor, detennos —le pidió Shen.

—Juuri, te recuerdo fuerte, podrás vencernos —la animó su abuelo.

—No... ¿qué no ven? Tiene un bloqueo... ¿qué te han hecho, mi niña? —le preguntó su abuela mientras caminaba hacia ella con una espada en su mano.

Juuri comenzó a retroceder, sin embargo, cuando iba a chocar contra Madara, lo atravesó como si no estuviera allí.

—Vamos, no seas cobarde, ya vi que recuperaste tu Kekkei Genkai, mínimamente podrás defenderte un poco, antes de que te maten —la animó Madara.

—¿Kekkei Genkai? ¿lo lograste, hija? —le preguntó ahora su padre.

Juuri se sentía atrapada y debía de admitir que muy trastocada por ver a su familia y antiguos amigos y compañeros, hablarle con tanta familiaridad, aunque tenían la intensión de matarla.

—Eres un monstruo, Madara —le dijo ella mientras se ponía de pie.

—¿Monstruo? No, los monstruos son ellos, ¿no lo ves? —le cuestionó con burla—. Sobrevive tanto como puedas, sería una pena haber preparado este encuentro familiar y que tú murieras pronto, aunque, ten por seguro que, si lo haces, tú serás la que vaya a quitarle la vida a Kakashi cuando te haya resucitado con el Edo Tensei —la amenazó Madara y desapareció.

Juuri miró a las seis personas delante de ella.

*Bien, Velkan, si te habías hecho del rogar o estás molesto conmigo, eso no debe de importar ahora, sólo... Ven a ayudarme *pensó y realizó el jutsu de invocación, sin embargo, como ya se hacía costumbre, su lobo no apareció* Carajo..*maldijo.