Pido perdón por tardarme mil años entre capitulo, los hago más largos para compensar. Pero no prometo actualizar pronto, aunque espero hacerlo.
* * * * *
Sienna le pidió a su padre que le enseñara maleficios y él la miró raro.
-¿Para qué quieres saberlos?
-No seas egoísta, papá. Su tú puedes conocer los hechizos yo también puedo -se quejó Sienna.
-Él sábado te enseño... Pero quiero algo a cambio.
Sienna se imaginó varios escenarios horribles. Ya había sacrificado su verano de helados por cuidar a sus hermanos de tiempo completo. Sienna creía a su padre perfectamente capaz de pedirle un masaje en los pies tres veces al día cada día hasta que Sienna muriera o que ella cocinara todo, lo cual le daba flojera.
-No es nada malo -dijo Snape mirando a Sienna con una mirada que no auguraba nada bueno-. Me ayudarás a desempolvar los libros que tengo en la Hilandera...
-¡Pero son muchísimos libros! ¡Tú tienes libros en lugar de paredes! ¿Y cuando voy a cuidar a los gemelos?
-Pues al mismo tiempo...
-¡Pero...!
-En esta vida tienes que aprender más que solo hechizos, Sienna.
-Por tu culpa voy a envejecer más rápido.
-Pobre niña ¿Cómo están tus rodillas?
-Me truenan, gracias.
Se sentó en su cama para hacer berrinche pero la risa de su padre la puso de buen humor aunque no quería admitirlo. Le gustas el sonido de la risa de su padre, su risa sonaba a un coro de trompetas viejas.
-¿Qué hechizos quieres aprender?
-Los que sepas.
-No creo que quieras saberlos todos.
-Apuesto a que Harry sabe más que yo, le voy...
-Si lo intentas te mando a dormir al pasillo.
-¡Papá!
-Te enseñaré las que necesitas saber.
-No es verdad -protestó Sienna-, me vas a enseñar lo que quieres que sepa.
-Exactamente. Y por eso debo saber qué hechizos aprendes -susupiró Snape cansado-. No quiero que andes por ahí lanzando hechizos desconocidos a diestra y siniestra...
Sienna lo miró ofendida, quizá más de lo necesario.
-No seas tan dramática -susurró Snape.
-¿Enserio me crees capaz?
-Prefiero no averiguarlo. Vete a desayunar.
-¿Y qué hechizo me vas a enseñar primero?
-Vete a desayunar, luego veo.
-Pero papá...
-Soy profesor de casi mil estudiantes y padre de tres hijos que no pedí, déjame descansar un rato, Sienna.
-¿Tres hijos que no pediste?¿Como una carga?
-No me refiero a eso...
-¿Sabes qué? Tienes razón, iré a desayunar. No voy a estresar al padre que no me pidió.
Salió de la habitación dando un portazo que hizo temblar los estantes y Snape miró fijamente la puerta.
-No lo vuelvas a arruinar, Severus -susurró Snape para sí mismo. Salió tranquilamente un rato después y estuvo el resto del día de muy mal humor. Gyffindor perdió casi doscientos puntos aquel día, Ravenclaw y Hufflepuff no se quedaron muy atrás.
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La Hija de Snape
Fanfic-¿Acaso tengo cara de haber pedido ser tu hija? -rugió Sienna-. Si vas a reclamarle a alguien asegúrate de que sea a mi madre... -Cambie ese lenguaje, señorita Snape -interrumpió Snape, aunque se veía dolido por la actitud de su hija -, le recuerdo...