𝐈𝐦𝐩𝐥𝐚𝐜𝐚𝐛𝐥𝐞 || 𝐉𝐞𝐨𝐧 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤

𝑉𝑒𝑖𝑛𝑡𝑖𝑜𝑐ℎ𝑜

A pesar de que estaba muy asustada, Ruby pensó en qué podía hacer para que la soltara. Respiró profundo y con todas sus fuerzas lo empujó, haciendo que retrocediera y se golpeara contra un mueble que había detrás de ellos. Mientras tanto, Jungkook aprovechó para hacerle una seña a Yoongi y que le prestara el arma que llevaba en el cinturón. Cuando la tuvo en la mano, le quitó el seguro y esperó un momento, intentando que no le temblaran las manos. Joong Seop tomó el trozo de vidrio e intentó apuñalar a Ruby con él, pero ella lo detuvo, tomándolo con fuerza de la mano, aunque en el proceso se hizo un corte en la palma. Se movieron un poco y en ese momento, Jungkook disparó. Joong Seop cayó al suelo y soltó a Ruby, que se dio la vuelta para mirarlo y descubrió que debía tener más o menos su edad.

—¿Estás bien? —Jungkook llegó corriendo y la envolvió en sus brazos.

—Sí —respondió ella, aunque todavía no lograba calmarse del todo. Cerró los ojos y le devolvió el abrazo, solo eso fue suficiente para que se sintiera bien.

Él se alejó de ella para mirarla con atención y no tardó en darse cuenta de que estaba sangrando. Tomó su mano y miró la palma, el corte no era muy profundo, afortunadamente.

—Vamos, tengo que curarte esa herida.

Caminaron hacia la puerta de la cocina, donde los demás los miraban con preocupación.

—¿Cómo sucedió eso, señorita Ruby? —preguntó Yi Hwan.

—Estaba tomando un vaso con agua y él apareció de repente —respondió ella, intentando restarle importancia, aunque se había quedado muy preocupada por el hecho de que aquel hombre la hubiera reconocido como la hija de Natasha.

—Cuando lo dejamos estaba medio muerto —dijo Yoongi—, no tengo idea de cómo se escapó.

—Ahora sí vamos a matarlo de verdad —Yi Hwan entró a la cocina y sacó el arma—, aunque no pude hacer que hablara.

Jungkook subió a su habitación con Ruby, la dejó sentada en la cama y después salió por el botiquín. Volvió a entrar un par de minutos más tarde y se sentó junto a ella.

—Lo siento mucho —dijo, y la tomó de la mano, para comenzar a limpiar la herida con un algodón y alcohol.

—¿Por qué? —ella hizo una mueca de dolor.

—Porque no pensé en que sería peligroso que estuvieras aquí. En realidad, no he pensado en lo peligroso que puede ser para ti, estar conmigo. He sido muy egoísta, pensando solamente en lo mucho que quiero tenerte a mi lado y no en que te puede pasar algo por mi culpa.

Ruby levantó la mano y le acarició la mejilla.

—Mírame —dijo, Jungkook levantó la mirada y tenía los ojos llenos de lágrimas—. Estoy bien, no sucedió nada, no te preocupes. No había manera de que supieras que esto iba a suceder, simplemente pasó, pero estoy a salvo.

—No tendría que haberte dejado sola... creo que nunca puedo proteger a las personas que amo.

Ruby sintió que se le rompía el corazón al escucharlo hablar de esa manera. Se acercó a él y lo envolvió en sus brazos.

—Nada de lo que ha pasado es tu culpa, mi vida, por favor no pienses eso.

Jungkook suspiró, intentando dejar de sentirse mal por lo sucedido. La soltó despacio y terminó de curarle la herida, envolviendo una venda alrededor de su mano.

—Jungkook —Yi Hwan tocó suavemente en la puerta.

—Voy —Jungkook le dio un beso en la mejilla a Ruby antes de salir al pasillo.